El miércoles comienza el nuevo curso escolar, y como es lógico ocupa y preocupa a los padres y madres con hijos en edad escolar. Pero también ocupa y preocupa al conjunto de ciudadanos aunque no tengan hijos o tengan una edad superior. La Fundació Gadeso, como cada año en estas fechas, ha publicado en Quaderns Gadeso (gadeso.org) los resultados de una encuesta donde ser refleja las opiniones sobre las fortalezas y debilidades de nuestro sistema educativo, sus principales problemas detectados y los posibles caminos de mejora.
Ha mejorado sensiblemente la importancia que la ciudadanía da a la educación en todas las islas. Destaca Menorca (7,6/10), le sigue Mallorca (7/10),Formentera (6,8/10), y en último lugar Eivissa (6,4/10). Este dato es importante precisamente en unos momentos en los que, a pesar de que oficialmente hemos superado la crisis, seguimos anclados en un desempleo juvenil agobiante que afecta especialmente a los sin estudios y sin una capacitación laboral y profesional. Se terminó el tiempo en que encontrar un trabajo era una tarea fácil, lo que abocaba el abandono escolar incluso en el ciclo de educación obligatoria. Sigue ocupando y preocupando el fracaso y abandono escolar (85%), pero se resalta un aspecto relativamente novedoso "una buena formación mejora las posibilidades de encontrar un empleo" (93%).
El nivel de insatisfacción disminuye a pesar de no alcanzar el aprobado. Resaltan como aspectos negativos: "no siempre lo que se enseña es útil para la vida laboral", aumenta de modo significativo la insatisfacción relacionada con la masificación (disciplina, alumnos por clase€), y aparece con fuerza "la falta de ayudas (becas, comedor€)". En el aspecto positivo "la implicación de los maestros y profesores en la formación de los alumnos", la profesionalidad del personal administrativo y de servicios. Probablemente tales sinergias positivas explican el nivel satisfactorio del "ambiente" en el centro escolar.
Aunque se reconozca una cierta mejora en los recursos destinados por el actual Govern, un 67% considera que siguen siendo insuficientes. Sus razones son claras: "La educación no es un gasto sino una inversión de futuro", y "Se ha de apostar por la educación y la formación para salir más rápido de la crisis". Inquieta especialmente la falta de inversión en infraestructuras, instalaciones, así como en su mantenimiento. Siguen vivos 112 barracones. Se achaca, entre otros factores, a la falta de inversión acumulada de los anteriores gobiernos pero también a una cierta falta de previsión ante la incorporación de nuevo alumnado.
Hay otro aspecto relevante: ¿cuáles son los motivos de elección del centro escolar para sus hijos? La pregunta sólo se ha realizado a las familias con hijos escolarizados. Aún siendo mayoritarios (54%) disminuye cuatro puntos el número de familias que consideran que la proximidad del centro al hogar familiar (algunas se refieren al lugar de trabajo) es el principal motivo de elección. En cambio que el motivo fundamental sea el proyecto educativo que ofrece el centro sube siete puntos y llega al 29%. Tales datos merecen una investigación más profunda. Los expertos dan relevancia a la ubicación del centro en los "entornos" del hogar familiar para una educación con raíces de los alumnos, sin dejar de exigir que tales centros de proximidad (especialmente si son de titularidad pública) ofrezcan un proyecto educativo propio y de calidad. Tal simbiosis (proximidad / calidad) es probable que se ofrezca en núcleos con una población estable, pero resulta mucho más dificultosa en ciudades populosas y con desarrollos urbanísticos desiguales (verbigracia Palma). No resulta extraño que las familias con recursos no evalúen la proximidad como un factor de interés, sino que elijan el centro escolar en función de su proyecto educativo, a veces ligado a su "imagen y prestigio social" (especialmente determinados centros concertados). El tema no es baladí.
En cualquier caso, es relevante que la educación y la formación nos ocupe y preocupe para que nuestros hijos/jas puedan acceder a un trabajo digno y estable. Pero resulta estimulante que un 53% considere que, además, "la educación (más allá de los modos y buenas maneras) es imprescindible para su desarrollo personal", y un tercio (33%) opine que "la educación (más allá de la simple urbanidad) es necesaria para aprender a convivir (más allá de la mera coexistencia) con los otros".
