"Se robaba sobre los enfermos de los hospitales, sobre las medicinas, sobre los niños de las guarderías y los comedores escolares. Se robaba sobre el medio ambiente -incineradoras y escombros eran presas muy ambiciosas-, se robaba a manos llenas sobre el transporte". Así hablaba el conservador Indro Montanelli en L'Italia degli anni di fango, a traducir por La Mallorca de los años de fango que Rodrigo de Santos ayuda a desentrañar tras haber participado con entusiasmo en su gestación.
Enhorabuena a quienes despiertan hoy a las comisiones del tres por ciento solicitadas por el PP, o a la petición de nueve millones de euros a los inmaculados Villar Mir y Florentino por el pillaje en la sombra de Son Espases. La hipocresía metamorfosea el saqueo en un benemérito peaje en la sombra.
Puesto que de Matas ya hablamos dilatadamente en los años de fango, nos detendremos en la actualización insuficiente del PP. Dada su conselleria clave en el Govern más corrupto de la historia de España, Mabel Cabrer ha sido condenada al ostracismo como portavoz popular. La sustituta Marga Prohens se siente obligada a abonarse a las exageraciones de la titular, y Mabel Prohens es un engendro de indudable vis cómica.
A mediodía de un viernes, Mabel Prohens enarbola este periódico para denunciar una portada exacta y premonitoria sobre los huecos en el discurso de Bauzá en torno a la financiación de la sede del PP. Lo grave no era la acusación irracional, sino que la portavoz ni siquiera había entendido el titular en cuestión. Cabrer distorsionaba voluntariamente, su sucesora no sabe leer. No queda demasiado claro dónde estriba la ganancia con el recambio.
A peor, unas horas más tarde del mismo viernes se desvelaba la declaración íntegra de Rodrigo de Santos ante el fiscal Pedro Horrach. Era uno de esos textos que provocan escalofríos en agosto, y que dejaba reducida a cenizas la versión del híbrido Mabel Prohens. De hecho, al día siguiente Bauzá se desmarcaba estratégicamente y volvía a ignorarlo todo sobre la sede. Era el reflejo lógico en quien no mejora a Matas como gobernante.
El comportamiento contradictorio de Mabel Prohens no solo se explica por las dudas sobre el octanaje del combustible que debe emplear en sus intervenciones. Se ha contagiado del "caloret" popularizado por Rita Barberá, cuando no acierta a hilvanar un discurso fallero coherente. El pasado lunes, Prohens volvía a la carga minimizando las revelaciones de Rodrigo de Santos, "porque aquí desmintió los titulares de prensa". Otro problema grave con la lectura, porque la declaración íntegra del autor de la campaña de Matas estaba firmada sin error posible.
Ayer mismo, Rodrigo de Santos no solo confirmaba "los titulares de prensa" ante el juez Castro, sino que los dejaba envejecidos por la magnitud suplementaria de los amaños desvelados. Por fin, Prohens despierta de su letargo para anunciar que "estamos escandalizados por cómo parece que se hacían antes las cosas". ¿Y ahora?
