Por un momento, casi se puede pensar que nos hemos equivocado y hemos puesto el segundo episodio en lugar del primero. Los creadores del 'thriller' sobrenatural 'Romancero' (Prime Video, viernes, día 3) nos arrojan a un mundo arisco sin introducciones, sin sobreexplicaciones. Sasha Cócola ('Techo y comida') y la gran debutante Elena Matić son dos jóvenes a la fuga tras un incidente que ha sacudido una comunidad de lo que parece la Andalucía oriental. Lo vamos a dejar aquí.
Porque decir más sería arruinar las atrevidas estrategias narrativas del guionista y escritor granadino Fernando Navarro, conocido por su trabajo en, por ejemplo, 'Verónica' o 'Bajocero', y el director murciano Tomás Peña, que con el colectivo Manson ha firmado vídeos para Rosalía, C. Tangana (incluyendo el icónico 'Mala mujer') o Katy Perry. Lo suyo fue un caso de simbiosis inmediata. Ambos creadores hablan el mismo idioma híbrido: "A los dos nos une el interés por aspectos de la cultura pop como el cine de género, el manga o el anime, pero también por algo tan tradicional como el flamenco", nos explica Navarro en el festival de Sitges, en el que se presentó la serie. "Se están viendo muchos nuevos acercamientos a la tradición española en la música, o en los vídeos que ha hecho Tomás, pero no tanto en la ficción. Podríamos decir que esta es la primera serie del nuevo flamenco. Está más cerca de Rosalía y de Rocío Márquez y Bronquio que de muchas otras cosas".
Sin entrar en detalles argumentales, hablaremos de 'Romancero' como un cruce del costumbrismo español con el fantástico más desatado. (Tomás): "Yo quería que contásemos una realidad, pero que en esa realidad hubiese unos componentes fantásticos que no fueran irónicos y que funcionasen precisamente por eso". (Fernando): "Convertimos en territorio mitológico esa parte de Andalucía entre Tabernas y Guadix, esa especie de no comarca. Con ello, estamos siguiendo el linaje de Lorca y Sergio Leone. Aquí se situaba 'Bodas de sangre' y aquí se rodó 'El bueno, el feo y el malo"'.
"Esoterismo cani"
Una de las comparaciones quizá inevitables, aunque existan diferencias conceptuales, es la legendaria película 'Déjame entrar' (original y 'remake'), sobre todo por su visión poco o nada sentimental de la aventura casi infantil. En 2018, Navarro había compartido el jurado oficial de Sitges con el autor de la novela primigenia, John Ajvide Lindqvist. "Podría unirnos con él esa manera de hablar de preocupaciones muy reales desde el fantástico, como sucede con autores que también nos ha marcado, como Stephen King o Lovecraft", señala el autor de la novela 'Malaventura', en la que ya se escondían algunos personajes de la serie.
El Hollywood de los noventa es un ingrediente reconocido del cóctel ("la idea era acercarse al Fincher de aquella época, en la medida de lo posible", dice Peña), pero también el de los ochenta parece impregnar la imaginería: ¿no son esas motos nocturnas puro 'Jóvenes ocultos'? Navarro duda un poco, pero su compañero acepta la comparación. "A mí esa película me encanta. Pero es que esto de las motos y los coches es parte de la realidad con la que crecí en La Unión. Cuando tenía catorce años, me juntaba con los de dieciséis que tenían moto y nos íbamos a los pueblos de al lado. Era algo que tenía que estar. Hay un fetichismo de lo cani". A lo que Navarro añade: "Esoterismo cani, llegamos a decir".
"El funeral de Carlitos"
Otra audacia destacable de 'Romancero' es presentar a Ricardo Gómez (el que fuera niño de España por 'Cuéntame') como mitad más cruel de una pareja de guardias civiles (el otro es Guillermo Toledo) que parece escrita por el ultraviolento S. Craig Zahler. "Nos gustaba decir que esta serie era el funeral de Carlitos", dice Peña en referencia al personaje más famoso de Gómez. "Jugábamos mucho con los contrastes. Podríamos haber cogido a otros actores para hacer de agentes de la ley, pero nos parecía más interesante contar con ellos".
El ingrediente mágico que corona la mezcla es escurridizo e inesperado: esa gran música original a cargo de Jim Williams, antiguo brazo derecho de Ben Wheatley ('Turistas') y compositor de las películas de Julia Ducournau ('Crudo', 'Titane') o la abrumadora 'Possessor' de Brandon Cronenberg. "Estábamos pensando: '¿quién es el músico referente del nuevo fantástico?' Jim era el colaborador perfecto", explica Navarro con orgullo. "Era guitarrista de formación y tocó con This Mortal Coil. Las conversaciones con él resultaban tan fascinantes. Es un genio, es una de las patas de la serie. Abría el proyecto a una abstracción que, de haber recurrido a tópicos musicales más autóctonos, nos habría costado alcanzar".
