José Luis irrumpió en 'First Dates' con gran entusiasmo al reencontrarse con Carlos Sobera después de mucho tiempo y notar su mejora. De naturaleza nerviosa, encuentra su mayor relajación en las manualidades, especialmente aquellas más desafiantes. Al saludar a Matías, el camarero del restaurante de citas, sorprendió al presentador al pedirle una caipiriña en portugués.

José Luis, el comercial de vibradores que llega dispuesto a encontrar el amor en 'First Dates' Cuatro

Carlos Sobera indagó sobre su procedencia, y José Luis, soltero, explicó que no venía de Brasil, sino del barrio de Tetuán, aunque había residido en Brasil durante casi 8 años de su vida, destacando su etapa como un período de bonanza económica. Trabaja como vendedor de ventanas de PVC, confiando en su habilidad para la venta: "Puedo vender cualquier cosa, incluso una piedra o un garbanzo".

Al preguntarle por lo más insólito que había vendido, mencionó su línea de consoladores de importación, como el "cubano", el "colibrí" y el "torpedo", productos que describe como excepcionales y que son de importación.

Elena, la mujer con la que le tocó cenar, no estaba contenta con la cita que le había tocado. Durante la cena parecía no haber ningún tipo de feeling y así fue durante la cena. Cuando surgió el tema de la música, José Luis se levantó animadamente y compartió su pasión por el flamenco, revelando que había pasado una década tocando la guitarra.

Elena, la cita de José Luis con la que no encajó durante toda la noche. Cuatro

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Aunque ambos disfrutaron de un momento divertido, José Luis bromeó con gracia cuando Elena decidió no continuar con la cita, sin embargo, ninguno de los dos sintió una conexión para una segunda cita.