­Ha sido uno de los sacerdotes más mediáticos de la televisión y toda una estrella en los años noventa por su participación en Crónicas marcianas. El pasado sábado, el padre José Apeles reapareció en televisión en La noria para confesar el mal momento por el que está pasando.

Apeles asegura estar sufriendo una profunda depresión y haber perdido las ganas de vivir. "Cada día le pido a Dios que sea el último de mi vida", aseguró en el programa respondiendo a las preguntas de Terelu Campos. La periodista desveló que Apeles sólo salía al cine y a beber para olvidar. Apeles dijo además que estaba la mayor parte del tiempo medicado, que dormía hasta la noche, que sus ventanas estaban bajadas y no sabía ni qué día ni la hora que era.

Pese a todo, no perdió la oportunidad de pedir un puesto de trabajo en Telecinco, algo que le alegraría la vida: "Si un día hay un debate sobre algo, si tuviese yo una silla en La noria como siempre me hubiese gustado a lo mejor no estaría tan deprimido".