Una historia que combina acción, aventura, intriga, romance y elementos característicos del western. Un equipo técnico y creativo responsable de grandes éxitos de la televisión. Espectaculares escenarios en plató y localizaciones en exteriores y un reparto que despliega ante la cámara talento y atractivo, son los principales avales de Tierra de lobos, la nueva serie de Telecinco, que tiene en sus papeles protagonistas a Álex García y Junio Valverde.

Juan Fernández, Antonio Velázquez, María Castro, Adriana Torrebejano, Dafne Fernández, Nicolás Coronado, Jordi Rico, Eva Pedraza, Mamen Duch y la debutante Silvia Alonso, entre otros, completan el reparto de la serie. La ficción está ambientada en la España de finales del siglo XIX y recoge las aventuras de los hermanos Bravo, dos forajidos huidos de la justicia que luchan por comenzar una nueva vida en su tierra natal.

Manuel Villanueva, director general de Contenidos de Telecinco, explicó ayer que la serie "tiene tres claves principales: una historia de amor imposible, la aventura y la acción de dos personajes que, huyendo de un atraco, se encuentran con su destino y un secreto, el que guarda la tierra que los protagonistas defienden contra la injusticia, los atropellos y la tiranía de un cacique". "Se trata de la gran apuesta para el otoño, una gran producción en la que hemos puesto mucha alma y también muchos medios. Va a ser una serie de muy bella factura, con todos los ingredientes necesarios para no defraudar a los espectadores", aseguró. Por su parte, Juan Carlos Cueto, director general de Multipark Ficción y productor ejecutivo de la ficción, afirmó que Tierra de lobos posee elementos diferenciales de otras series actuales, como la fusión de valores modernos con los del siglo XIX, conseguida a través de la combinación de géneros y la compleja construcción de los personaje. Asimismo comentó que el estilismo de los personajes mezclará elementos del rock y del cómic con un exhaustivo trabajo de documentación sobre las ropas que se vestían a finales del siglo XIX.