Bien inspeccionado, el contenido de un cubo de basura puede ser una magnífica fuente de información y, a la vez, también de creatividad. Los deshechos hablan de las personas y de su vida, en un mundo donde todo aquello que se compra suele terminar convertido en basura, desde un simple tomate hasta un ordenador.

Este taller pretende concienciar a los niños sobre la problemática de los residuos que generan las personas. Para hacerlo, darán una nueva vida a todo aquello que ya no sirve o que ya no se quiere. Los participantes deberán traer residuos no orgánicos así como juguetes, peluches u otros elementos que sirvan para crear nuevos objetos.

Actividad recomendada para familias con niños y niñas a partir de 5 años.