La actual portavoz del PP de Calvià y líder provisional de la junta local, Luisa Jiménez, aseguró ayer que a ella nadie de la dirección del partido en Palma le ha comunicado aún qué pasará a partir de ahora, después de que haya aparecido el nombre de una figura histórica de los populares, Teresa Martorell, como posible solución de consenso para acabar con la guerra interna.
En declaraciones a este diario, Jiménez manifestó que respeta la opción de Martorell, aunque subrayó a continuación que resulta "un poco contradictorio" que los que hablan de "renovación" en la junta apuesten por este tipo de perfil, con una larga trayectoria en el Consistorio, donde fue regidora entre 2003 y 2011. "En todo caso, si la consideran la persona adecuada, adelante. Yo lo respetaré", agregó. Jiménez no asistió a la reunión convocada el lunes por la tarde en la sede de los populares en Palma, en la que estuvieron presentes el presidente del PP balear, Biel Company, y el secretario general, Toni Fuster.
A la cita acudió una quincena de afiliados calvianers que se oponen a que ella lidere esta situación de interinidad en la que se encuentra el partido en el municipio tras la renuncia de José Manuel Ruiz después de los malos resultados en las elecciones municipales de mayo. En teoría, a esa reunión estaban convocadas los 100 afiliados que habrían expresado su voluntad de dimitir si Jiménez continuaba en el cargo.
Seguirá como concejal
La actual portavoz municipal del PP recalcó ayer que, con independencia de la solución que se acabe acordando, ella tiene la idea de continuar con su acta de concejal. "Quiero demasiado a este partido. Seguiré luchando por él como portavoz, como concejal o donde me pongan", argumentó la edil, quien espera afrontar en los próximos días el estudio del proyecto de presupuestos para dar la réplica al gobierno municipal en el pleno de la semana que viene.
El origen del conflicto interno se remonta a la decisión de Ruiz de no recoger su acta de concejal, según coinciden en señalar varias fuentes de la junta local. En ese momento, el grupo municipal del PP, formado por cinco regidores, tuvo que decidir quién sería el portavoz durante la legislatura. Como no había acuerdo, lo votaron entre ellos. El relato que cuentan varios afiliados populares es que Luisa Jiménez tuvo los apoyos de Rosa García y de Antonio Alarcón, frente al criterio de Miguel Cañellas -un funcionario ya jubilado que fue cargo de confianza con Manu Onieva- y de Pedro Porcel, hijo de la exalcaldesa de Andratx Margalida Moner.
Persona cercana a Ruiz
La facción del partido más opuesta a Jiménez la ve como una persona demasiada cercana a Ruiz, como la encarnación de una etapa política ya amortizada, y reclama en consecuencia un perfil renovado para no perder el liderazgo de la derecha en el municipio. Otras voces dentro del PP atribuyen el descontento a un simple deseo de los críticos de forzar las cosas para provocar dimisiones en el grupo municipal que acaben permitiendo la entrada en el grupo municipal de miembros de la lista electoral más afines a ellos.
Todo ese clima viene aderezado por el malestar que siempre ha estado latente dentro una parte de la línea más dura del PP calvianer con el liderazgo autonómico de Biel Company, sobre todo en temas de lengua. En el congreso que le dio la presidencia, en 2017, se enfrentó a José Ramón Bauzá, que estaba apoyado por el exalcalde Carlos Delgado y una parte de la junta de Calvià.
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