El Consell de Mallorca tumba en el pleno de hoy la restricción de la venta de viviendas a las personas que no lleven dos años empadronados en Mallorca y medidas más duras para los grandes tenedores. El PSIB-PSOE se desmarca de sus socios de Podemos y Més y rechazó la medida votando con la derecha.

Una moción de los podemitas para "garantizar el acceso a la vivienda" pedía restringir la venta de inmuebles en Mallorca a las personas que no lleven más de dos años de residencia en Balears. Si bien el texto no menciona las personas extranjeras, la norma está claramente dirigida a ello. Entre los argumentos destacan que el precio del metro cuadrado está disparado en los 3.000 euros y que se debe destinar el 50% del sueldo de un trabajador a pagar el alquiler. La vicepresidenta y líder de Podemos en el Consell, Aurora Ribot, ha indicado que el objetivo es restringir la compra a las "personas con arraigo".

Los datos también apuntan que casi el 40% de compraventas de viviendas en Balears se producen con compradores extranjeros por la influencia del turismo. De igual modo, también ha sido rechazado el punto de la moción de Podemos, que reclamaba pasar a la consideración de grandes tenedores de viviendas a partir de cinco inmuebles. Ahora está fijado en 10. Todo ello, según la propuesta de Podemos, debido a que en las islas hay en estos momentos 71.255 viviendas vacías.

Desde el PSOE han apuntado que ellos están de acuerdo en poner límites y favorecer el acceso a la vivienda. Sin embargo, las leyes europeas lo impiden al considerar a todos los ciudadanos de la Unión Europea en igualdad de condiciones en todos los territorios de la unión. En este mismo sentido se pronunció el portavoz del PP, Llorenç Galmés, que tildó la moción de "cierto aire xenófobo"

El PSOE sí vota a favor de algunos puntos de poco calado de la moción, como es el caso de pedir al Estado que se declare Mallorca como zona "tensada" en la nueva Ley de Vivienda Estatal.