La doctora Rosa Duro es una de las expertas que está diseñando la estructura para que el día 25 Baleares pueda proporcionar una muerte digna a quien lo solicite y cumpla con una serie de condiciones. «Si alguien considera que el sufrimiento que está padeciendo es inaceptable y nada puede paliarlo, y tiene una enfermedad incurable, puede decidir que es mejor morir que seguir viviendo de esa manera», explica Duro en conversación con este diario.
¿En qué supuestos se podrá solicitar la eutanasia?
Tener una enfermedad o un padecimiento incurables. Pueden ser una o varias patologías como por ejemplo una ELA. O una serie de enfermedades crónicas que te llevan a tener unas condiciones de vida muy limitadas. Esas enfermedades también pueden limitar tus capacidades para comunicarte o expresarte, moverte o respirar. No es tanto dolor como sufrimiento, para el dolor hay tratamientos. La persona tiene que considerar que la enfermedad que tiene le produce un sufrimiento inaceptable y que nada de lo que le podamos ofrecer se lo va a solucionar.
Los detractores de la ley dicen que los cuidados paliativos ya garantizan una muerte digna.
La ley habla de enfermedades incurables y padecimientos crónicos incurables, por tanto todas estas personas van a tener necesidades paliativas. Y es fundamental que el servicio de salud las pueda atender. Hemos de luchar por tener los mejores cuidados paliativos; pero tenemos que entender que hay personas que consideran que esos cuidados paliativos no son suficientes para el sufrimiento que están padeciendo. En todo caso, mi total respeto a los detractores de la ley que esgrimen razones de conciencia. Pero también hay que tener muy claro que en el momento en que la normativa entre en vigor el 25 de junio, a la persona que la solicite le asistirá todo el derecho a hacerlo.
¿Tranquiliza tener la salida que representa la eutanasia, aunque no se solicite?
Estamos haciendo sesiones de sensibilización por hospitales y centros de atención primaria. Esos profesionales sanitarios trabajan en contacto con personas que sufren y escuchan repetidamente un comentario: que si un día llegan a ese nivel de sufrimiento, solo el hecho de saber que hay una ley de eutanasia les alivia.
¿Qué filtros hay que pasar para que una eutanasia sea aprobada?
El primer paso será firmar una solicitud que estará en la web de la conselleria de Salud, con información para pacientes y profesionales. Después el paciente elegirá a un médico responsable y pasará con él dos procesos deliberativos. El profesional le informará de palabra y por escrito de su enfermedad, pronóstico y posibilidades. Si con esa información sigue pensando en pedir ayuda para morir, y el médico considera que cumple los requisitos, le hará una consulta al médico consultor. Este profesional debe cumplir dos condiciones: no conocer previamente al paciente y ser experto en sus patologías. Si también considera que cumple con los criterios, el caso se pasa a la comisión de garantías y evaluación, en la que un médico y un jurista vuelven a repasarlo todo. Sería el tercer visto bueno.
¿Cómo será la administración de los fármacos?
Estamos preparando a unos equipos para que se familiaricen con los fármacos que se utilizarán. Es algo nuevo y no todos los profesionales están familiarizados con todo el proceso. La ley dice que el médico responsable acompañará al paciente hasta el fallecimiento, pero no tiene que ser él quien administre los fármacos. Y después el paciente tiene dos posibilidades: autoadministrarse los fármacos por vía oral, o por vía endovenosa. También puede optar por fallecer en el domicilio o en un hospital.
¿Cuántos residentes en Balears estima que solicitarán este derecho cada año?
Los expertos calculan que en Balears habrá unas 70 u 80 eutanasias anuales. Unas 60 en Mallorca, 14 en Eivissa y nueve en Menorca. Es una previsión, no lo sabremos hasta que se inicie. Habrá peticiones seguro porque hay asociaciones que lo piden desde hace tiempo en nombre de muchas personas. Todos hemos visto en los medios de comunicación casos muy paradigmáticos.
