Mañana de protestas en Mallorca por los drásticos recortes laborales que afronta el sector financiero. Y, según estimaron los sindicatos, con un seguimiento masivo. Los trabajadores del BBVA protagonizaron una huelga para protestar por los 37 despidos que el banco prevé formalizar en el archipiélago. Y los de CaixaBank pararon durante media hora en contra de las 358 salidas que la entidad planea en las islas. Ambas protestas fueron secundadas por el 90% de las respectivas plantillas, afirmaron los representantes de los trabajadores.

«Son días de reuniones para negociar una reducción de los despidos, pero por ahora en Balears no ha sido posible porque nos quedamos fuera de las recolocaciones que ha ofrecido la empresa en algunos casos», explicó ayer Joan Torrens, portavoz del sindicato Unió Obrera Balear (UOB).

La cifra de oficinas que serán clausuradas en las islas está sobre la mesa de negociación, pero Torrens prefirió no especular sobre cuántas se verán finalmente afectadas. En todo caso, advirtió de que el «perjuicio» para los clientes será notorio.

La red de sucursales ha adelgazado en los últimos años en la isla, pero los sindicatos advierten de que el tijeretazo previsto comprometerá la atención presencial en las oficinas. Especialmente en la Part Forana, donde pueden desaparecer algunas sucursales y otras restringir su horario.

La reciente fusión de Bankia y CaixaBank se ha saldado con un ERE que costará el despido de unos 7.700 trabajadores en todo el Estado —inicialmente la empresa planteó 8.200 salidas— y el cierre de más de 1.500 sucursales, el 27% del total.

Cartel informativo de la huelga en una oficina del BBVA en Palma. | R.

Los trabajadores de CaixaBank pararon entre las 11:00 y las 11:30 horas, mientras que los del BBVA protagonizaron una jornada de huelga. El banco planea despedir a 37 de los 250 trabajadores que contabiliza en el archipiélago y el cierre de cinco oficinas. «Es una reestructuración brutal. Además del problema de los despidos, van a dejar indefensa a una parte de la población», subrayó José Antonio Olmedo, delegado sindical de CCOO en BBVA.

«Llevamos dos meses negociando, que se dice pronto. El viernes terminan las negociaciones y la empresa presentará su expediente, pero nosotros como sindicato mayoritario tenemos claro que no firmaremos un acuerdo sin garantías. Así que vamos a seguir con la presión y estudiando nuevas movilizaciones», destacó Olmedo.

Concentraciones en las sedes

Los trabajadores escenificaron su descontento protagonizando concentraciones de protesta ante la sede de CaixaBank en Son Fuster, y del BBVA en la plaza del Mercat de l’Olivar. Ambas movilizaciones citaron a decenas de personas que reclamaron el cese de sus respectivos recortes de plantilla.