Vecinos de la urbanización de sa Torre (Llucmajor) denuncian los golpes y el maltrato continuado a un perro por parte de su dueño. Según aseguran, el maltrato se produce desde hace un año, y pese a que han intentado hablar con el propietario del can, éste "nos ha dicho que es su manera de educar al perro".

Según cuenta una vecina, la primera llamada alertando a los agentes se produjo en febrero, después de que el can estuviera encerrado en la terraza durante unos días sin comida ni agua. "Y comprobaron que efectivamente no eran condiciones para que el perro viviera ahí", señala, al tiempo que comenta que no interpuso una denuncia al asegurar los agentes que ellos mismos "abrirían un informe". "Fue un gran fallo", añade.

El siguiente episodio de maltrato se produjo el pasado domingo. Los vecinos volvieron a alertar a los agentes, y el martes una patrulla del Seprona se personó en la vivienda para comprobar el estado del can.

"Es una situación muy frustrante porque no nos hacen caso y de aquí a que lo hagan el perro no estará vivo", indica esta 'llucmajorera', para quien se "trata de un claro caso de maltrato animal". "Ahora lo hace con un perro pero en otra ocasión podría ser una mujer o un niño y la ley no hace nada", añade.