Exceltur prevé para Balears pérdidas por 9.249 millones (6.796 millones directos y 2.454 indirectos), lo que supone que el archipiélago acusa la mayor caída de la facturación en el sector en España, un 67, 4 % respecto al año pasado por el impacto de la pandemia.

La alianza formada por 31 de las grandes empresas del sector, en su encuesta trimestral de confianza empresarial, rebaja su previsión de pérdidas para el año turístico desde los 92.600 millones que calculó inicialmente a 83.134 millones por un ligero avance de la demanda nacional.

El lobby que preside Gabriel Escarrer lanza otro informe demoledor en el que se critican "las múltiples incertidumbres, restricciones y mensajes equívocos" del Gobierno de Pedro Sánchez, porque el turismo "no ha estado" en la agenda política española, lo que han llevado a la demanda extranjera a optar por otros países "más abiertos".

Se advierte que el próximo lunes se abre la puerta a al turismo extranjero con el corredor del plan piloto entre Balears y Alemania mientras "sigue la extraña indefinición sobre los acuerdos UE o bilaterales, que en apenas 3 semanas deben regir el tráfico fronterizo".

El parón turístico explicaría el 57 % de la caída del PIB en 2020 (-11,6 %) estimado por el Banco de España en su último escenario, y elevaría la caída de los ingresos por turismo en divisas a 43.975 millones de euros.

Exceltur calcula que desde el 15 de marzo pasado hasta el 30 de junio se habrá reducido la actividad turística en 43.460 millones de euros respecto a 2019, con 1,4 millones de personas afectadas (1,1 millones en ERTE y 300.000 que se han quedado en paro).

Para el tercer trimestre adelanta que la caída alcanzará los 28.000 millones de euros (un 47,6 % de descenso de la actividad) y en el cuarto sumará otros 12.000 millones (38 % de descenso), por lo que se cerrará el año con 725.000 personas en ERTE o en desempleo).

Ha faltado -dice Exceltur- "consistencia" para estimular la demanda interna, facilitando la movilidad turística entre CCAA en fases similares antes del fin del estado de alarma. Pide un "urgente y muy potente" plan de medidas transversales de apoyo al turismo -similar a los de Francia, Italia Portugal o Grecia- y un "eventual rescate" del sector por el Gobierno en los próximos meses, con fondos nacionales y comunitarios. Reclama la apertura de fronteras a más tardar el 1 de julio con la zona Schengen y Reino Unido, y "lo antes posible" con el resto de países para el largo radio.