El reparto del fondo estatal no reembolsable de 16.000 millones para las comunidades autónomas ha cambiado. Por ello, la presidenta del Govern indicó ayer que considera que esta nueva distribución permitirá la llegada de más dinero a Balears, pese a que lo calificó de insuficiente y así se lo transmitió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Según Armengol, el hecho de tener en cuenta la población real beneficiará a nuestra comunidad.

Al respecto, la presidenta explicó que, si en un principio se preveía destinar 10.000 millones a sanidad, 5.000 a compensar la caída de ingresos y 1.000 para temas sociales; finalmente serán 9.000 para sanidad, 2.000 para educación y 5.000 para caída de ingresos, de los que 4.200 irán a compensar esa caída y 800 para reforzar las pérdidas de transporte urbano terrestre.

Armengol también pidió que se puedan imputar fondos de cualquiera de las líneas a cuestiones sociales, porque el Ejecutivo ya había previsto ese destino.

El Govern quiere que tanto lo destinado a educación como a la caída de ingresos no se tenga que imputar al presupuesto de 2020, sino que pueda ser imputable a 2021. Aunque una parte del gasto tendrá que hacerse a principios del curso escolar, el Govern prevé que la caída de ingresos "sea más efectiva" el año próximo: "Según cómo haya ido la temporada turística". Armengol también reclamó a Sánchez cambiar el límite de gasto del 0,2% y liberar el remanente de los ayuntamientos.