Los sindicatos presionan al conseller March para que decida sobre la vuelta a los centros este curso y que no delegue la decisión en el Gobierno central.
El pasado jueves el conseller de Educación, Martí March, reconoció a los sindicatos no estar de acuerdo con la vuelta a clases este curso de los menores de 6 años y señaló que así lo trasladaría al ministerio de Educación en la reunión prevista para mañana.
Aseguró no ser competente para tomar la decisión. Desde entonces, los sindicatos no han parado de remitir comunicados insistiendo en que sí es competente y que la decisión le corresponde únicamente a él. UGT y UOB así se lo señalaron el viernes; el domingo era CCOO quién le pedía "valentía" para tomar la decisión y el lunes el STEI emitió un comunicado en el que indicó "que con el estado de alarma las únicas competencias autonómicas que están suspendidas son las sanitarias".
El lunes fue la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) la que emitió un comunicado reclamando varias medidas de conciliación, como permisos retribuidos para cuidar a los hijos.
El sindicato UOB reaccionó ayer rechazando que las escuelas sean las que deban ofrecer soluciones de conciliación y responsabilizó de éstas a empresas y a la Administración. FAPA ha aclarado estos días en sus redes sociales que piden fórmulas plurales al Govern (no solo a Educación) y no han solicitado un "retorno general", pero sí creen que la escuela puede cubrir parte de las necesidades de conciliación.
La entidad acusa a March de opacidad y de consultar previamente "con algunos padres y con algunos directores" los pasos a dar para organizar el final de este curso en vez de hablar y debatir con los representantes oficiales del sector.
Para dar respuesta a la necesidad de las familias, UGT propuso ayer crear centros que ayuden a la conciliación laboral y familiar con un coste económico "mínimo" a través de la mancomunidad entre el Govern, los ayuntamientos y los consells. Proponen usar instalaciones deportivas y recintos municipales.
Ocio infantil
Ocio infantil
Más de 40 entidades piden en un manifiesto para que se garantice el ocio infantil y juvenil este verano, una necesidad más necesaria que nunca. Solicitan abrir el máximo posible de centros educativos públicos y concertados para que haya espacio suficiente para poder llevar a cabo los actividades con seguridad y reclaman, ante la vulnerabilidad que han detectado, un sistema de becas para llegar al máximo de niños.
