La Audiencia de Palmacondenó el jueves a un hombre a un año y tres meses de prisión y trabajos comunitarios por amenazar y agredir a su expareja, de la que tenía una orden de alejamiento, en agosto de 2018.

El sospechosoreconoció los hechos ante el tribunal de la sección segunda y se declaró autor de un delito de malos tratos, otro de quebrantamiento de condena y otro de amenazas leves. Aceptó una condena de un año y tres meses de cárcel, 80 días de trabajos en beneficio de la comunidad y la prohibición de aproximarse y comunicarse con la perjudicada durante tres años.

La sala dictó sentencia 'in voce' contra el encausado y finalmente le suspendió la condena por un periodo de dos años.

Los hechos se remontan a finales de agosto de 2018. El hombre, pese a conocer que un juzgado de instrucción de Palma había acordado una orden de protección en favor de su expareja, que le prohibía acercarse y comunicarse con ella, reanudó la convivencia con la mujer en el domicilio de ella, en Palma

Durante los días en los que ambos convivieron en la vivienda y al menos hasta el 31 de agosto de 2018, el hombre, con la finalidad de amedrentar a la perjudicada, le profería expresiones amenazantes como "me las vas a pagar, te voy a reventar la cabeza", mientras que, de forma agresiva, golpeaba los enseres y muebles de la casa, según la versión de la fiscalía.

En el transcurso de la tarde del 31 de agosto, la víctima pidió al encausado que abandonara el domicilio debido su comportamiento. Acto seguido, el maltratador la agarró con fuerza de las muñecas, la zarandeó, la agarró luego del cuello y le propinó finalmente una fuerte bofetada en la mejilla derecha. Tras la agresión machista, abandonó el piso.

La afectada, como consecuencia del maltrato sufrido, padeció un traumatismo en el antebrazo y una contractura muscular cervical. La mujer renunció en un primer momento a ser indemnizada, según el ministerio público.