El investigador de la UIB Pablo Escribá ha recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) la sanción de 600.000 euros que le ha impuesto la dirección general de Farmacia por comercializar, durante años, el Minerval, un medicamento contra el cáncer en fase experimental. Escribá, catedrático de Biología en la UIB, fue exculpado por la Audiencia de una presunta estafa en la venta del Minerval y un juez remitió el caso a la conselleria de Salut para depurar responsabilidades en vía administrativa.

Según fuentes del Govern, la dirección general de Farmacia abrió expediente sancionador contra Escribá por una supuesta falta grave derivada de la comercialización, durante años, del Minerval.

El juez Enrique Morell en su auto de archivo de la causa sí declaró probado que el investigador había facilitado el fármaco experimental a pacientes de cáncer o a sus familiares, aunque Escribá declaró que lo entregaba a precio de coste.

Sanción máxima

Las fuentes informantes señalaron que el Govern planteó inicialmente que la multa para el infractor podía ser de un millón de euros, dentro de la escala máxima y debido a la gravedad de los hechos.

Sin embargo, el instructor del expediente decidió, tras investigar el caso y oír los argumentos del catedrático, situar la sanción en 600.000 euros, al estimar que el científico no había incurrido en todas las agravantes del tipo aplicado. Finalmente, el Govern asumió los criterios del instructor y multó a Pablo Escribá con los 600.000 euros propuestos.

El sancionado recurrió en reposición contra la multa y ahora ha acudido a la sala de lo contencioso-administrativo del TSJB, según las fuentes.

La multa está basada en la Ley del Medicamento, que castiga severamente la comercialización de medicamentos no autorizados.

La fiscalía se opuso al archivo de la causa penal contra el catedrático, al entender que sí había engañado a algunos enfermos prometiéndoles unos efectos que el Minerval no tenía. Una empresa de Palma sigue adelante con el proceso para legalizar este medicamento.

La UIB también abrió expediente a los dos docentes

En el caso Minerval estuvieron imputados los catedráticos de la UIB Pablo Escribá y Xavier Busquets, que fueron exculpados por la Justicia. La institución académica les abrió, de forma paralela, un expediente.

Busquets, según el juez, nunca vendió el Minerval, una comercialización que se atribuyó en exclusiva a Escribá. El juez rechazó que los dos docentes se prevalieran de su papel en la UIB en este caso.