El juez Miguel Florit será suspendido provisionalmente en sus funciones si se dicta auto de apertura de juicio oral contra él en el llamado caso Móviles, los presuntos delitos cometidos por ese magistrado al emitir cuatro autos en una pieza separada del caso Cursach y que habrían afectado al secreto profesional de tres periodistas. La instancia adecuada para suspender a un juez es el Consejo General del Poder Judicial y la base legal es la Ley Orgánica del Poder Judicial.
El CGPJ se basará, presumiblemente, en lo previsto en el artículo 383.1 de la Ley Orgánica del Poder Judicial y como consecuencia de la apertura de juicio oral contra él.
La suspensión se mantendría hasta tanto recayera en la causa penal que se sigue en su contra ante la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB) sentencia absolutoria o auto de sobreseimiento.
Presuntos delitos
La magistrada del TSJB Felisa Vidal dictó el pasado día 12 auto "de procesamiento" contra Florit por cuatro presuntos delitos: prevaricación judicial, contra la inviolabilidad del domicilio, contra el ejercicio del derecho al secreto profesional del periodista y de interceptación ilegal de comunicaciones.
La jueza dio diez días a las acusaciones particulares y populares y fiscalía para formular escrito de acusación contra el juez o pedir el sobreseimiento.
El auto del día 12 era susceptible de recurso ante la propia Vidal y, después, en apelación ante la Sala de lo Civil y de lo Penal.
Sin embargo, el casi seguro recurso del magistrado, defendido por Josep Zaforteza, no paraliza el plazo para calificar la causa. Una vez calificada, la instructora deberá decidir si abre juicio oral contra el juez delcaso Cursach y por qué delitos.
No obstante, Vidal podría esperar a que la sala de lo Civil y de lo Penal se pronunciase sobre el recurso al auto de "procesamiento".
Una vez abierto el juicio oral, entraría en escena el CGPJ que, antes de tomar una decisión, podría dar pie al interesado y la fiscalía para que hicieran alegaciones.
La suspensión provisional supondría que Florit no podría desempeñar funciones de juez y tendría que apartarse así de los casos que lleva en su juzgado (instrucción 6) y del caso Cursach, que investiga en instrucción 12, en sustitución de Manuel Penalva, que tuvo que dejar el caso al ser recusado.
El caso Cursach ya está prácticamente instruido, pero es de una complejidad mayúscula, por el elevado número de investigados, la existencia de varias piezas separadas y los miles de folios que ocupa. Otro magistrado tendría que hacerse cargo de ese macroproceso.