El silencio es la postura institucional adoptada por la Universitat después de que este diario hiciera pública el pasado jueves la denuncia por acoso laboral presentada por una profesora del departamento de Filosofía; una denuncia que ha derivado en una instrucción judicial que ha concluido con un catedrático y un profesor doctor investigados.

La UIB declinó ayer hacer valoraciones sobre la situación, ahora ya judicializada, del departamento de Filosofía. Se señaló que la institución ha colaborado en lo que se le ha requerido y que no se harán valoraciones hasta que no concluya el proceso judicial.