Meliá aumenta un 240% el beneficio por acción en cuatro años

Meliá Hotels International celebró ayer su junta general bajo la presidencia del fundador de la empresa, Gabriel Escarrer Juliá, que se dirigió a los accionistas como presidente no ejecutivo para resaltar que la compañía “está gestionando con éxito la transición digital”. Escarrer Juliá señaló que las “palancas clave” para el futuro de Meliá son fortalecer el gobierno corporativo, incidir en la expansión internacional y gestionar el talento de sus empleados.

Su hijo, y vicepresidente ejecutivo, Escarrer Jaume, expuso los positivos resultados financieros del grupo durante el año pasado “y la adecuada gestión de la deuda”, que “están contribuyendo a construir una empresa más rentable y más solvente (...) que en 2017 distribuyó casi 3.000 millones de euros entre todos sus grupos de interés”. “Para el ejecutivo, es muy importante que las empresas exitosas trabajen conjuntamente con la sociedad en la generación de valor compartido y citó varios ejemplos de transformación de destinos que Meliá ha impulsado estos últimos años, como el proyecto Calviá Beach (para la transformación sostenible de Magaluf) o el Palau de Congressos de Palma, que el grupo espera convertir en un motor de transformación y mejora del turismo y el modelo de ciudad en Palma”, indicó la compañía.

Escarrer Jaume señaló que las perspectivas para este año son favorables en el sector turístico global, pero señaló algunos factores de riesgo como la competencia del alquiler de viviendas a turistas, el brexit y los cambios de gobierno en Italia y España.

Por otro lado, cabe destacar que Meliá Hotels International anunció ayer que eliminará este año los plásticos de un solo uso de todos sus hoteles, una decisión que evitará más de 15 toneladas de emisiones CO2 cada año correspondientes al tratamiento de los residuos.

Sin plásticos

Este compromiso, con el que la cadena de la familia Escarrer da “un paso más en la contra el cambio climático” afecta a botellas, vasos, bolsas, pajitas o posavasos, que serán sustituidos de manera inmediata por materiales reutilizables.

El anuncio lo realizó Gabriel Escarrer. Según indicó, solo el año pasado se consumieron más de 22 millones de botellas en los hoteleras de la cadena. Por ello, la medida tendrá un gran impacto cuantitativo en su día a día, pero también será un reto para sensibilizar a los casi 30 millones de clientes que aloja cada año.

Para ello, Meliá ha creado y distribuido ya una hoja de ruta para que a lo largo de estos meses se vayan sustituyendo completamente los elementos de plástico de un solo uso por materiales biodegradables o ecológicos, y tan pronto como resulte posible se retire también este material de los productos cosméticos de las habitaciones.