El juez Enrique Morell admite a trámite la querella presentada por la fiscalía Anticorrupción por los contratos a dedo que otorgaron varias administraciones dirigidas por Més a su jefe de campaña electoral, Jaume Garau. Entre los querellados por los preuntos delitos de prevaricación y tráfico de influencias figura el propio Garau, que se benefició de estos contratos sin concurso público, y cuatro miembros del Govern del Pacto de esta legislatura, todos de Més.

El magistrado, que comunicó ayer la admisión a trámite, no ha acordado todavía la fecha en la que deberán declarar los cinco imputados, ya que siguiendo la petición planteada por la fiscalía, ha solicitado al Govern una serie de documentos, empezando por los expedientes de los contratos.

Cabe recordar que la Intervención de la Comunidad revisó los expedientes de los contratos a Garau y concluyó que había irregularidades administrativa en cuatro de ellos además de un "fraccionamiento indebido" en uno de los encargos adjudicados desde la Conselleria de Cultura.

Armengol: "Confío en él"

Precisamente, la presidenta del Govern, Francina Armengol, tuvo que responder ayer en el Parlament sobre si continúa respaldando a su vicepresidente Biel Barceló después de la querella por el caso Contratos. Armengol aprovechó para salir en defensa de Barceló y expresar su confianza en él. "Ha dado todas las explicaciones y se han asumido responsabilidades políticas", respondió la socialista. "Confío en él", acabó respondiendo la presidenta a la pregunta formulada por el portavoz de Ciudadanos, Xavier Pericay sobre las adjudicaciones a dedo.

"A Biel [Barceló] hace muchos años que lo conozco y estuvimos cuatro años luchando en la oposición contra los recortes la legislatura pasada. Sin embargo, no sé dónde estaba usted ni donde estaba Ciudadanos", respondió la líder socialista a Pericay. "Nos hemos equivocado en cosas, pero hemos pedido disculpas y asumimos responsabilidades", zanjó.

Pericay, que también afeó a la presidenta la imputación en el caso Sa Nostra del portavoz parlamentario del PSIB, Andreu Alcover, acusó a Barceló de "estar rodeado de corrupción" y alertó a la presidenta que, mientras lo mantenga, "también lo está usted". "Su vicepresidente ha entregado tantas cabezas como han hecho falta y las seguirá entregando hasta que no queden más para salvar la suya", apuntó el portavoz de C's.

Armengol zanjó su cara a cara con Pericay preguntándole por qué su formación no ha reclamado al PP devolver los 150.000 euros ingresados irregularmente por la campaña electoral de 2007, tal y como han concluido la Sindicatura de Cuentas y el Govern.

El PP: "Que el Govern se persone"

Precisamente,el Partido Popular reaccionó ayer a la admisión a trámite de la querella por los contratos de Més, exigiendo al Govern a que se persone como acusación particular en el caso ya que, señaló la portavoz del PP, Marga Prohens, "se investigan delitos contra la administración". Desde Més, su portavoz David Abril, que apuntó que su partido ya "ha asumido responsabilidades desde el minuto uno al máximo nivel" y que "no hay ningún presunto implicado en la primera ni en la segunda línea política", coincidió en que el Govern deberá personarse en el caso "por coherencia", si bien señaló que esa es una decisión del Govern. No obstante, Abril evitó valorar la decisión al considerar que se trata de "un paso más dentro del procedimiento judicial".

Desde el Ejecutivo aseguraron que el Govern se personará como acusación tal y como lo ha venido haciendo en todos los casos de corrupción, así como en los de violencia de género, y que todavía no lo ha hecho "por una cuestión de plazos", pero que se personarán.

Cinco imputados

La querella de Anticorrupción ha propiciado la dimisión del director de la Agencia de Turismo Balear (ATB), Pere Muñoz, que era el único de los cinco imputados que seguía aún en el Govern. Además de él, entre los querellados figura también la exconsellera de Cultura, Ruth Mateu, que dimitió por este escándalo; el que era director general de Cultura, Jaume Gomila; y el exdirector del Institut de Estudis Baleàrics -ahora Illenc-, Josep Ramon Cerdà, que fueron cesados tras destapar Diario de Mallorca el escándalo.

Anticorrupción acusa a estos políticos de haber contratado a Garau de forma irregular. La fiscalía investiga el fraccionamiento, también desvelado por este diario, de uno de los contratos realizados con el estratega electoral. El jefe de campaña de Més habría obtenido unos 150.000 euros por estos contratos públicos por parte de áreas en manos de su partido.