Balears ha registrado 17 muertes por ahogamiento en el agua en lo que va de año, un 5% más que el año pasado, según confirman fuentes del Instituto Nacional de Ahogamiento (I.N.A) y la Federación Balear de Salvamento y Socorrismo. A nivel nacional, han sido 372 (un 15% más que el año pasado) las víctimas, por lo que Balears constituye un 4,6% de estas muertes. "Hay que tener en cuenta que aún quedan dos meses, septiembre y octubre, que son críticos para nuestra profesión ya que afectan a la gente de la tercera edad", apunta el presidente de la Federación, Carlos de España.
Estas muertes, según explica De España, "se producen en un 51% en playas y en un 37% en piscinas". "La mayoría de ahogamientos, un 90%, ocurren en zonas no vigiladas", añade. Esto es un problema que se debe a "la falta de recursos humanos en playas y piscinasfalta de recursos humanos en playas y piscinas sin vigilancia, tarea específica de la Administración Pública".
Las zonas más conflictivas, donde hay más riesgo, son las playas de Magaluf y Palma por el perfil del bañista, según la Federación de Salvamento y Socorrismo. Aun así, "el 76% de los ahogados son de nacionalidad española y un 80% hombres". "También hay problemas en las playas del norte de la isla, una zona de mucho oleaje y corrientes. Se podría decir que todas las playas tienen su peligro latente, siempre activo", explican.
Por todo esto, las principales causas de estas muertes son, en general, "el caso omiso a los señales y a los socorristas, el atrevimiento, el alcohol, el desconocimiento del lugar, la hidrocución (comunmente llamada 'corte de digestión') y la falta de vigilancia de los niños por parte de los padres".
"Dicho esto, pienso que desde hace unos años ya tenemos unos datos que nos indican que tenemos un problema que afecta a la vida humana y como tal es trabajo de la administración que le ponga solución", opina Carlos de España sobre el número de muertos y las causas. Por esto, cree que "no puede ser que solo se hagan grandes inversiones en campañas de tráfico y de circulación vial para evitar accidentes y, en cambio, se inviertan cero euros en campañas de prevención del ahogamiento". A todo esto, hay que recordar que en junio Tráfico contabilizó 544 muertos en las carreteras españolas desde enero hasta junio, 172 más que las víctimas de las aguas hasta agosto.
Es por todo esto que el presidente de la Federación de Salvamento y Socorrismo se pregunta: "¿Qué precio tienen estos 372 ahogados en España? ¿Se podría haber hecho algo más? Contesto, rotundamente, que sí". Entonces, indica que "lo primero es que nuestra administración haga sus deberes, pongan más soluciones y no se queden cruzados de brazos".
"Tengo constancia del gran trabajo que se está realizando desde la Dirección General de Emergencias del Govern balear, pero considero que hay demasiados organismos públicos de diferentes administraciones para controlar todo lo que conlleva la seguridad de nuestras playas, parques acuáticos y piscinas, tanto públicas como privadas", explica De España.
Cuidar al turismo
El presidente de la Federación también apunta a la importancia económica de la seguridad porque "si vivimos del turismo, tendríamos que hacer un pensamiento, ya que tenemos la suerte de presumir de nuestras maravillosas islas". "Creo que lo primero que tenemos que hacer es que nuestros turistas se sientan seguros y que cada año quieran volver", apunta.
Para toda esta seguridad y prevención, es importante el trabajo de la Federación que "hace lo que determinan sus estamentos: deporte y formación de técnicos de salvamento y socorrismo".
"Colaboramos siempre que nos lo piden con la Administració Pública para promocionar campañas de prevención para evitar ahogamientos en espacios acuáticos naturales", explica.
Entonces, concluye en que "falta más control e inspección, además de mano dura contra los que incumplen la normativa porque están jugando con nuestras vidas".