El plan de actuación del Govern para ampliar la red de infraestructuras de servicios sociales en Balears contempla una inversión pública de 35,8 millones de euros hasta 2021 en 22 centros, diez de ellos de nueva construcción y el resto de reforma o adaptación, según explicaron ayer la presidenta del Govern y la consellera de Servicios Sociales, Francina Armengol y Fina Santiago.
El plan supondrá la creación de 566 nuevas plazas residenciales para dependientes, 133 nuevas plazas de centros de día y 69 más en centros de menores, además de la creación de 556 puestos de trabajo "cualificados" en las residencias, según resaltó Santiago, además del empleo indirecto que se cree en la construcción "no especulativa" para realizar estas infraestructuras. En este sentido, incidió en la aportación al "cambio de modelo" económico que implicará esta actuación, además de la "necesaria" atención social a la población que lo necesita.
La presidenta del Govern resaltó que el plan para ampliar la red pública de infraestructuras de servicios sociales "demuestra que hay otra manera de hacer política" respecto a la del PP en la pasada legislatura. "En vez de una política contra las personas, que dejaba a la gente en la cuneta, este Govern hace lo contrario", afirmó Armengol insistiendo en que el plan refleja "la apuesta valiente y firme por las personas" de su Ejecutivo, una cuestión que consideró que es de "justicia social".
Los 35,8 millones de euros que se destinarán a estas infraestructuras serán aportados por el Govern, los consells insulars y los ayuntamientos. Santiago precisó que aproximadamente el 60 por ciento de la inversión correrá a cargo de las arcas autonómicas. "El único que no aporta nada es el Estado, a pesar de que las comunidades autónomas se lo han pedido reiteradamente", lamentó la consellera.
Santiago resaltó que con las nuevas plazas la oferta residencial para dependientes aumentará en un 40 por ciento y la de plazas en centros de día, en un 15 por ciento. El objetivo del Govern, según dijo, es que todos los municipios dispongan de un centro de día, aunque las localidades más pequeñas podrían compartirlo entre las más próximas.
Objetivo
La consellera sostuvo que si se cumple con la previsión, al acabar la legislatura se habrá cumplido con ese objetivo en todos los municipios en el caso de Menorca y Formentera y en el 80 por ciento de los de Mallorca, mientras que la situación en Eivissa quedará menos resuelta. En este sentido, recordó que la fórmula para construir centros de día pasa por que los municipios lo pidan, ya que es un servicio municipal, de tal modo que los ayuntamientos ceden los terrenos y el Govern construye la infraestructura.
En Mallorca el plan contempla la construcción de las residencias de Son Dureta, Marratxí y Son Martorell Ciutat Jardí y la adaptación o reforma de las de Son Tugores, Campos y Llucmajor. Además, se construirán nuevos centros de día en Porreres, Felanitx, Son Ferriol y Santa Maria y se adaptarán los de Marratxí, Llucmajor, Son Tugores y Muro. En lo que se refiere a centros de menores, el plan incluye la reforma de Es Pinaret con la que se crearán 40 plazas más y la construcción de un centro terapéutico en Palma. De estos proyectos ya están en marcha las obras de Son Tugores, las de Es Pinaret, las del centro de día de Son Ferriol y las del centro de día y noche de Felanitx.
En Menorca se construirá una residencia para dependientes en Maó y se adaptarán las de Bintaufa, Ferreries y Sant Lluís. En Eivissa, según explicó Santiago, ya se ha impulsado un cambio de gestión en la residencia y centro de día de Sant Antoni y el jueves se inauguró la residencia para discapacitados físicos de Can Raspalls. En Formentera se construirá una residencia de 18 plazas.
