"Las prospecciones son ruinosas porque el petróleo está tan bajo que lo que se extraiga no dará para cubrir los costes de buscarlo, sacarlo y distribuirlo. Pero sobre todo el petróleo es caro para el planeta". Joan Groizard, director general de Energía, tiene claro que los tiempos de la gasolina llegan a su fin. Es lo que se decidió en la cumbre del clima de París, que hace un mes unió a las grandes potencias en un cambio de paradigma: el petróleo que queda debajo de tierra, ahí se quedará. "Esas reservas ya no se podrán explotar", resume Groizard, que asume que eso probablemente se incumpla. En cualquier caso, quiere que Balears marque una senda que tome esa premisa de petróleo cero en 2050 como objetivo real. ¿Cómo lo hará la región que hoy tiene menos renovables instaladas? Según Groizard, llegando a un acuerdo que comprometa a todas las sensibilidades políticas y sociales con "una ley contra el cambio climático y otra de renovables", dice, antes de desgranar la política energética de los próximos años.
Consenso para conseguir un 100% de renovables en 2050
Nadie invertirá en renovables si el futuro de una apuesta que siempre es a largo plazo depende de un cambio de Govern. Por eso el Govern prefiere un acuerdo menos ambicioso que involucre a toda la sociedad que uno más radical que acabe siendo modificado al primer volantazo político. Balears tiene hoy un 2% de renovables. Del resto, el 30% llega por cable de la península y el 70% se produce en las islas. La mitad de esa parte isleña es carbón (muy contaminante). "Queremos 100% de renovables en 2050", apunta Groizard, que trabaja en planes para acercarse a ese objetivo.
La administración dará ejemplo: cubiertas solares
El Govern se compromete a reducir el consumo energético de las instalaciones públicas un 5% al año. Además aumentarán medio megavatio al año la superficie de cubiertas solares instaladas en los edificios públicos (ahora hay medio megavatio total). Es la forma de dar ejemplo, porque también quieren fomentar el autoconsumo fotovoltaico (placas solares), de modo que "sea la norma, no la excepción", y que los edificios nuevos incorporen cubiertas solares.
Comprar solo renovables
La administración (hospitales, colegios, edificios públicos) consume el 5% de la energía balear. El Govern quiere avanzar hacia un objetivo: que solo se compre a la península energía generada por fuentes renovables.
Ayudas para contrarrestar el impuesto al sol
El Gobierno Rajoy creó el llamado "impuesto al sol", que obliga a pagar un peaje al sistema incluso a quien genera y consume en casa su propia energía renovable. El Govern no puede derogarlo, pero van a eliminar la tasa para instalaciones de autoconsumo y ofrecerán líneas de ayuda a las empresas y particulares que instalen fuentes de energía limpia. La idea es que quien ponga renovables obtenga un ahorro económico o pueda rentabilizar la inversión.
¿Estética o ecología? El Govern quiere más eólica
En el Govern quieren impulsar un mix de eólica, energía mareomotriz y con olas, biomasa y solar que cuente con el apoyo de todos . No es fácil en unas islas en las que, paradójicamente, grupos ecologistas se han opuesto a proyectos de renovables porque afectan a aves (eólica) o consumen litoral. "Con el cambio climático vamos a perder litoral, y antes de instalar nada siempre habrá informe de impacto ambiental", subraya el alto cargo del Govern, que insiste: las renovables "ya no son una opción, sino el único camino".
