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En contra

Antonio M. Lacy: "Los pacientes piden ´Viva la vida´ de Coldplay en el quirófano"

Antonio M. Lacy: "Los pacientes piden ´Viva la vida´ de Coldplay en el quirófano"

-Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Usted puede trabajar jugando al ´Candy Crush´?"

-Sinceramente, no, pongo música en el quirófano porque no quiero oír ni una mosca. No puedo despistarme del paciente, pregunto a mis colaboradores si también entran en el Liceo con la función empezada y haciendo ruido. "Ya nos está pegando la bronca", dicen.

-¿Qué música ponen en el quirófano?

-Me relaja un señor que pasó poco tiempo en Mallorca, donde fue muy maltratado, Chopin. Gracias a Spotify le preguntamos al paciente qué música quiere escuchar, y te sorprendería ver cuántos eligen Viva la vida, de Coldplay. Tiene mérito gustarle a gente de todas las edades.

-¿El cirujano es la estrella?

-Lo difícil es anestesiar al paciente, y no operarle. El cirujano equivale al piloto de carreras. En mi conferencia pongo el vídeo de la entrada de un Ferrari en boxes, donde se ve que sin equipo no se ganaría nada.

-El familiar de un paciente le deseó suerte.

-Suerte, en las corridas de toros. Supón que un comandante dijera "te llevaré a Shanghái si tenemos suerte". Los factores superfluos pueden erradicarse en un 99.9 por ciento. Has de saber qué vas a hacer y por qué.

-¿Se imagina un país que funcionara con la precisión de su equipo quirúrgico?

-No sé si sería maravilloso o espantoso. Las libertades quedarían bloqueadas, seguimos protocolos estrictos y poco democráticos. Tuve un antepasado liberal que fue fusilado, y creo que la sociedad necesita una dosis de juerga y descontrol. De lo contrario, habría que inventar Los juegos del hambre, o la gente se entretendría con el Candy Crush en el lugar de trabajo.

-¿Su sucesor será un robot?

-En absoluto. Por ahora el robot es un esclavo, un manipulador. La próxima generación de cirujanos morirá sin haber sido sustituida por una máquina.

-Trabaja a vida o muerte.

-Es una frase que está bien. ¿Me crea tensión? Sí, me gusta estar estresado, tal vez por la adrenalina o porque me interesa la evolución y la innovación.

-¿Ser hiperactivo ayuda?

-Mi trabajo me apasiona, y mi vida profesional cambiaría poco si me tocaran 250 millones de euros. Seguiría trabajando porque me encanta, lo tengo fácil.

-No me creo que se opere igual a una Koplowitz que a una Pérez.

-Aunque no te lo creas, a los pacientes les hago lo mismo, pero existe una presión social diferente que puede ser negativa.

-¿Todos los ricos se vuelven tan generosos tras una operación de éxito?

-No. Una persona maravillosa me dijo, "ay, Antonio, qué inocente eres, por qué te crees que son muy ricos, no te van a dar ni un duro". Hay que aproximar las donaciones al sistema anglosajón y, si sirven para desgravar impuestos, bendito truco que ayuda a todos.

-Si un banquero gana millones, ¿cuánto ha de cobrar el cirujano que lo tiene en su manos?

-Soy más rico que la mayoría de banqueros porque, como me dijo un amigo muy rico, "lo más importante es el silencio y el tiempo". Sorprende que los futbolistas fracasen y cobren primas, pero siempre digo que ganaremos lo mismo que ellos cuando hagamos una operación en el Camp Nou con cien mil tíos aplaudiendo.

-La obesidad le está dando mucho trabajo.

-Sí, pero el 25 por ciento de intervenciones de obesidad fracasan, y el paciente reengorda. Hay que individualizar el tratamiento y no funcionar como una fábrica.

-¿Mallorca podría convertirse en el hospital turístico de Europa?

-Un catalán con casa en la isla de mucha inteligencia e influencia, Leopoldo Rodés, asegura que podríamos ser el Palm Beach europeo, porque está a tres horas en avión y con una buena sanidad. En una isla griega enfermas y te mueres, pero en Mallorca también se necesita una gran inversión para que la pregunta se haga realidad.

-¿Por qué los grandes médicos mallorquines están en Barcelona?

-También hay grandes médicos en la isla. Estuve a punto de ir a Mallorca y no me quisieron. Veinte años después, me alegro de la suerte que tuve porque trabajo en el mejor hospital de España, en primera división.

-¿Hurgando en miles de cuerpos ha visto el alma?

-Soy católico, pero estoy muy enfadado con lo que los católicos llaman Dios. Veo cosas injustas, tengo dudas de que haya algo más. He encontrado el alma en los ojos de pacientes y familiares. No puedo certificarlo por no ser oftalmólogo, pero te miran y es muy bonito.

-¿A qué se dedicaría en una reencarnación?

-Creo en la reencarnación y me gustaría ser músico, pero no me he portado bien y en el libro Maldito karma vi que me reencarnaré en hormiga o cucaracha. Y si no, volvería a ser cirujano.

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