El sindicato STEI-i acudió a la Fiscalía ayer para denunciar todo el episodio referente a la contratación de Joan Trobat, el profesor protegido por el PP. Los representantes sindicales expresaron su confianza en que Pedro Horrach, fiscal anticorrupción al que han pedido hora para explicarle los pormenores, confirmará la existencia de un delito de malversación de fondos públicos al haberse intentado contratar a un profesor sin cumplir los principios que establece la ley: "Igualdad, mérito, capacidad y publicidad".
Además, según explicó Cosme Orell, secretario de enseñanza pública del sindicato, en este caso ven posibles indicios de delitos como prevaricación, tráfico de influencias y soborno de funcionario. En el escrito registrado ayer se responsabiliza a la consellera Núria Riera; a la jefa del Servicio de Empleo (SOIB), Xesca Ramis; al secretario general de la Conselleria, Bartomeu Alcover; y, por último, al frustado asesor. Al ex director general Miguel Deyá, que estalló y dimitió al negarse a llevar a cabo el enchufe alegando motivos presupuestarios, lo señalan como posible testimonio.
El documento interno por el que se llegó a ordenar la adscripción del profesor a la Conselleria (y que según Riera fue oficialmente registrado por un error administrativo) es un fundamento clave de la denuncia presentada ayer, además de "una muestra clara de nepotismo", según Pere Pol, miembro del STEI-i que colaboró con los servicios jurídicos para redactar el escrito presentado ayer.
"La punta del iceberg"
Orell indicó que este caso puede ser "la punta del iceberg" de toda una serie de irregularidades cometidas por esta Conselleria en la contratación de interinos. Según expuso, en los últimos meses han pedido información en mesas sectoriales y por escrito sobre varios casos en concreto y aunque algunos han sido explicados de forma razonada, quedan varios contratos que aún les plantean dudas y sobre los que no han recibido respuestas satisfactorias.
Pol mencionó por ejemplo casos de interinos que están formando parte de equipos directivos en distintos centros educativos de las islas, algo que la normativa no admite. Se da la circunstancia de que este hecho se produce en algunos de los centros en los que ejerce el cargo de director una persona afín a la Conselleria y que, al no encontrar respaldo en el claustro, ha necesitado traer gente de fuera para acabar de completar su equipo. Orell también habló sobre extrañas situaciones referentes a interinos a medias jornadas.
El sindicato ha pedido hora con el fiscal anticorrupción Pedro Horrach "para facilitarle toda la información que necesite para tirar adelante esta investigación" y esperan poder contar con su colaboración.
Además, ayer el STEI-i también registró un escrito en la sede de Educación para exigir a su titular que dé explicaciones y arroje luz sobre el caso.
Los sindicalistas señalaron diferentes aspectos que ven cuántomenos llamativos sobre el intento de fichaje de este interino como que su destino era un departamento (Coordinación de direcciones generales) aún no creado o que Educación lo quería como asesor docente cuando no tenía ninguna experiencia como profesor (ni siquiera ha sido tutorizado) ni en cuestiones de gestión relacionadas con la educación "por no hablar de la injustificada necesidad de recurrir a docentes para realizar tareas administrativas".
