La declaración como imputada de la infanta Cristina se ha convertido, por mor de la atención de los medios de comunicación y por lo laborioso de su materialización, en una especie de juicio.
Cabe recordar algo evidente: hoy no se juzga a la hija del Rey en los juzgados de Vía Alemania. Por tanto no habrá veredicto de culpabilidad o de inocencia, no habrá sentencia.
Los abogados de doña Cristina se han esforzado en repetir a lo largo de esta semana que hoy se demostrará la inocencia de su representada. Es lo que ellos transmitirán, a buen seguro, cuando acabe la jornada de interrogatorios.
Sin embargo, la duquesa de Palma saldrá de los juzgados tan imputada como entró. No habrá milagros. Al menos, de momento.
Su exculpación, algo probable a priori, no se producirá hasta que acabe la instrucción, hasta que el juez seleccione qué imputados pasan a la lista de acusados y cuáles no.
