Diego Torres sacó ayer la artillería pesada durante su comparecencia ante el juez Castro y, durante más de siete horas, cargó contra la infanta Cristina, la Casa Real y, por supuesto, contra Iñaki Urdangarin.
El exsocio del duque de Palma, al contrario de lo que ocurriera en su primera declaración en febrero de 2012, dio respuesta a las preguntas de la fiscalía y del juez, pero antes de someterse al interrogatorio aportó nuevas pruebas: un sobre con más correos electrónicos y documentos sobre la gestión del Instituto Nóos con la intención de poner de manifiesto que tanto la infanta como su secretario tenían un papel activo en la entidad.
En este sentido, Torres explicó que la hija menor del rey formaba parte de la junta directiva de Nóos y, por tanto, tenía el mismo poder de decisión que el resto de miembros, incluido el secretario de las infantas, Carlos García Revenga, y el propio Iñaki Urdangarin.
Pero Torres fue aún más lejos y afirmó que la labor de Nóos se llevaba a cabo bajo la supervisión de la Casa Real y que una vez que Urdangarin dejó la presidencia del instituto, el asesor externo de las infantas y conde de Fontao, José Manuel Romero, le habría recomendado guardar las apariencias si seguía al frente de sus negocios, de forma que no se mostrase "en primera línea" de los mismos.
En uno de los emails entregados por Torres al juez, el duque de Palma solicitaba la colaboración de Romero a la hora de dar impulso a la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (FDCIS), considerada sucesora del Instituto Nóos y constituida en diciembre de 2006, cuando habían pasado ocho meses de la teórica desvinculación del duque de sus negocios después de que así se lo ordenase el rey.
La amiga del rey
Diego Torres también mostró varios correos electrónicos en los que Iñaki Urdangarin pedía a la noble alemana Corinna Sayn-Wittgenstein, amiga de don Juan Carlos, formar parte de su fundación, por reconmendación del rey.
El nombre de Corinna, amiga del Rey, aparece en varios de los emails aportados hace varias semanas por parte de Torres, en los que el Instituto Nóos agradece la participación de la noble en la primera edición del Valencia Summit, evento investigado por un supuesto desvío de fondos públicos.
