El sindicato de enseñantes STEI-i considera que el anteproyecto de ley de modificación de la Ley de Función Pública, que elimina el catalán como requisito para acceder a la Administración, es "el ataque más grave contra la lengua catalana desde la democracia" y un reflejo de la política de "genocidio cultural" del Govern.

Así lo expresa en un comunicado en el día en que este proyecto, que no quita el requisito del catalán para los docentes, se somete a información pública para que los partidos y otros organismos presenten alegaciones.

El sindicato afirma que el anteproyecto pretende "arrinconar a la lengua catalana en la Administración a su mínima expresión" y denuncia que la mayoría absoluta del PP en Baleares y en España "no justifica la ruptura del consenso que la Ley de Normalización Lingüística ha caracterizado la vida institucional de los últimos 25 años".

"Denunciamos la política de genocidio cultural y lingüístico que ha puesto en marcha el Govern de José Ramón Bauzá, que tiene como finalidad la sustitución de la lengua y cultura propia de las Islas Baleares por la cultura y lengua castellana", afirma el sindicato.

Recuerda que este es el segundo borrador del anteproyecto y cree "impresentable" que el conseller de Administraciones Públicas, Simón Gornés, "solo haya tenido en cuenta las alegaciones presentadas al primer borrador de anteproyecto de ley encaminadas a arrinconar, aún más, la presencia del catalán en la Administración".

Además indica que solo un sindicato, ANPE-CEMSATSE, pidió la supresión del requisito del catalán y considera que la ley no garantizará "el derecho de los ciudadanos de usar siempre que quieran la lengua catalana" en su relación con la Administración.

Por todo ello, anuncia que tomará "todas las medidas" a su alcance para "combatir" esta política en contra de la lengua catalana que considera "un misil en la línea de flotación de la identidad colectiva de las Islas Baleares y la cohesión social del país".