El Consell de Mallorca adjudicó en la pasada legislatura los contratos de mayor importe económico con deficiencias en los informes técnicos y sin justificar adecuadamente la fórmula seguida ni las modificaciones de proyectos y su posterior encarecimiento, según se desprende de la fiscalización de la gestión de UM en 2006 –que gobernó con apoyo del PP–, y que acaba de presentar la Sindicatura de Cuentas. En la mayoría de casos, las deficiencias administrativas –como gusta llamar la Sindicatura a los incumplimientos de la ley de Contratos– se detectan en la construcción de carreteras iniciada ese año.

Así, los auditores públicos han constatado que en una decena de expedientes de obra viaria –los de mayor cuantía–, "falta, o es insuficiente, la justificación del procedimiento y la forma de adjudicación utilizados". En bastantes ocasiones, además, "los informes técnicos no se encuentran suficientemente argumentados, ya que no motivan las puntuaciones que se establecen en función de la documentación aportada", dicen los síndicos.

Las deficiencias afectan sobre todo a carreteras en Campos y Muro, la reforma de la carretera Santa Maria-Sencelles, reposición de guardarraíles de seguridad en las autopistas, o la nueva variante de Formentor, en el Port de Pollença, que suman unos 32 millones de euros. De todas las obras auditadas, esta última es sin duda la que presenta mayores deficiencias de tramitación, de hecho incurrió en casi todas las posibles. Las más reseñables son que el acta de replanteo para poder iniciar la obra "se realizó fuera del plazo establecido" según la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas. "Esta dilación no se encuentra justificada, sobre todo porque este expediente se aprobó por tramitación de urgencia", señalan los síndicos.

La primera fase de esta variante, destinada a sacar el tráfico del Port de Pollença con destino a Formentor, se adjudicó por 4 millones de euros. La Sindicatura constata también que se superó el plazo establecido para iniciar la ejecución del contrato, "sin que se justifique el retraso", en un "hecho que constituye una causa de resolución" del mismo, aunque no se hizo.

Documentos desaparecidos

Otra de las deficiencias significativas es la desaparición de importante documentación del interior de los expedientes.

Así, en las carpetillas de los proyectos de reposición de barreras de seguridad en la autovía Palma-sa Pobla y en la de Levante, y en la del proyecto de mejora del camí Fondo PM-30-Polígon de Llevant, "no se han conservado las plicas con las proposiciones general, económica y técnica de los licitadores que no resultaron adjudicatarios del procedimiento de contratación". Recuerdan los síndicos que en el expediente "ha de quedar una copia acarada" de estos documentos, y que su desaparición "limita" la verificación del proceso de adjudicación de los expedientes". Dicho de otro modo, impide auditar correctamente si la adjudicación ha seguido todos los trámites legalmente establecidos.

En los dos primeros expedientes, además, "las ofertas económicas presentadas por los licitadores no tienen fecha de registro de entrada", y lo mismo con otra documentación del empresario que resultó adjudicatario. Aunque lo peor del caso es que en la reposición de guardarraíles de un tramo de la autopista Palma-sa Pobla, el informe del banco "no deja constancia de la solvencia económica" del empresario que debía realizar la obra.