Esta organización hizo hoy público un comunicado en el que denuncia que "hace más de tres años" que el Consulado General de Ecuador en Balears "funciona al margen del decreto que autorizó la apertura de esta sede en la capital balear", ante "la pasividad de las autoridades ecuatorianas".

Según indica, desde entonces el Consulado funciona en Cala Ratjada, lo que hace que sea "más rápida una gestión volando a Madrid o Barcelona que desplazándose" hasta esta "distante población".

La Asociación Solidaria Ecuatoriana señala que "se ha pretendido subsanar esta dificultad" mediante "la creación de una oficina de apoyo" en Palma, aunque, a su parecer, el planteamiento "debería ser a la inversa".

Argumenta a este respecto que este tipo de sucursales de apoyo "no deben ser tramitadores que sólo complican y encarecen los servicios", sino que deberían prestar ayuda de forma gratuita y "estar en las poblaciones distantes y no en la capital".