La consellera de Salud, Aina Castillo, cuestionó ayer el número de dosis antivirales adquiridas por el Gobierno central para hacer frente a una eventual pandemia de la gripe aviar.

El ministerio de Elena Salgado distribuirá a lo largo de 2006 cerca de dos millones de unidades entre las comunidades autónomas en función de su población y ante la posibilidad de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declare la situación de emergencia si se demuestra la transmisión entre humanos de la enfermedad.

Del total de dos millones de dosis del antiviral oseltamivir -comercializado como Tamiflu- compradas al laboratorio fabricante Roche, 41.000 corresponden a Balears. Con esta cantidad se cubre sólo al 4,5% de la población de las islas, advirtieron fuentes oficiales de la conselleria. Aina Castillo asegura que otros países guardan existencias para al menos el 20% de sus habitantes. El coste del tratamiento asciende en el archipiélago a 400.000 euros, un desembolso que debe afrontar la Comunidad Autónoma. El colectivo de personas a las que se recomendará su inoculación son aquellas afectadas por la gripe, los trabajadores sanitarios y de emergencias y los enfermos de alto riesgo, como es el caso de quienes padecen afecciones coronarias.

Aina Castillo comparte las objeciones de sus homólogos de las regiones gobernadas por el Partido Popular. El consejero madrileño Manuel Lamela lamenta que España llegue "tarde" a la compra adicional de antivirales, ya que otros países ya están adquiriendo unidades extras, lo que puede dar lugar a un desabastecimiento.

Elena Salgado lanzó un mensaje de "tranquilidad" a la sociedad española ante la posibilidad de que se declare una pandemia provocada por la mutación del virus que afecta a las aves, e hizo un "llamamiento a la responsabilidad" de los líderes políticos y autoridades sanitarias para que no creen "alarmas injustificadas" en relación con este tema.

Calma

En todo caso, las conselleries de Agricultura, Sanidad y Medio Ambiente trabajan conjuntamente desde el pasado mes de septiembre haciendo un seguimiento de la crisis. Según indicó Castillo, se han tomado muestras de animales para descartar la llegada del virus al archipiélago. Tanto los análisis tomados en las islas como los realizados a nivel nacional descartan cualquier motivo de alarma.

Desde la irrupción de la gripe aviar fueron sacrificados en Asia decenas de millones de aves de corral. En países en los que la población vive cerca de las aves han enfermado desde 2003 unos 120 seres humanos y más de 60 murieron. Indonesia ha sido el cuarto país de Asia en infectarse después de Vietnam, Tailandia y Camboya.

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