- Que el hallazgo de las nuevas variantes de coronavirus en las islas y el frenazo en la dispensación de algunas vacunas hagan que la ciudadanía vaya a susto diario en la actual crisis sanitaria.
- Que el cambio de nombres en las calles de Palma para cumplir la Ley de Memoria no deje de generar un encendido debate entre los ciudadanos.
- Que el Palma Arena siga siendo un edificio laberíntico al que la mayoría de usuarios accede por donde no debe.
- Que la fuerza de voluntad de los libreros vaya a sacar adelante un Sant Jordi seguro en Palma este año, tras la suspensión del pasado.
- Que de momento las discotecas de Mallorca solo se abran para rodar series de televisión en su interior.
Oferta Flash
Suscríbete a Diario de Mallorca durante nueve meses por tan solo 9,99 euros