Menos iPads y más descuentos. Los efectos de la crisis también se han hecho notar en los presentes que ofrecen bancos y cajas al contratar algunos de sus productos. En los últimos meses han ido a menos mientras que, por contra, se han incrementado los incentivos monetarios y los descuentos en gastos y compras habituales.

Así, el tiempo en que las entidades apostaban por captar nuevos clientes obsequiando con productos de ocio electrónico, como iPads o tablets, son casi historia.

Si hace apenas tres meses se podían adquirir en al menos seis entidades por domiciliar la nómina, en la actualidad sólo se pueden obtener en tres. Y en algunos casos, como con la cuenta Nómina para mayores de 59 años de BBVA, exige unos ingresos mensuales mínimos de 3.000 euros.

Algo parecido pasa con los depósitos que en lugar de intereses ofrecen un regalo (televisores, menaje, maletas...). Un tiempo atrás casi todas las entidades disponían de ellos mientras que ahora pocas los incluyen en sus carteras que, además, van menguando. Es el caso del Depósito Estrella de “la Caixa”, que ha eliminado el Tablet y la cámara de fotos digital Olympus de la oferta de regalos.

También se han vuelto a relanzar los incentivos en dinero por llevar la nómina de un nuevo cliente. En esta línea, ING Direct ha vuelto a poner en marcha el Plan Amigo, que da 50 euros a la persona que aporta un nuevo usuario a la entidad y otros tantos al nuevo cliente.

El caso del dinero de plástico

Las tarjetas son los productos que más han aumentado su oferta de descuentos. A las tradicionales devoluciones de un porcentaje del dinero gastado en gasolineras, en los últimos meses han incorporado rebajas en establecimientos como grandes cafeterías, determinadas cadenas hoteles, centros comerciales, grandes superficies, tiendas de moda... Así lo hacen, entre otras, la tarjeta Visa Shopping de Deutsche Bank, la tarjeta Citi Oro de Citibank o la Visa Barclaycard.

Además, han empezado a proliferar los sorteos entre sus usuarios para fomentar que realicen compras con ellas. Y este verano se han rifado viajes, como ha hecho Kutxabank; altavoces y maletas, como Bankia, y cheques con dinero, como Banco Caixa Geral o Laboral Kutxa.

Cabe recordar que con la crisis, se ha incrementado el uso de las tarjetas de débito en detrimento de las de crédito. El gasto de las primeras creció, según los últimos datos aportados por Visa, un 4,9% en 2012. Un total de 32.321 millones de euros.