El equipo de Urología de Juaneda Hospitals que lidera el doctor Joan Benejam ha sido pionero en la introducción en la sanidad privada balear de la cirugía laparoscópica urológica, que ha sustituido a la cirugía abierta, especialmente en intervenciones de eliminación de cánceres de próstata, vejiga y riñón.

«Hoy en día —explica el prestigioso médico urólogo— ya no se concibe operar una patología abierta por un problema oncológico de este tipo, sino que se realiza siempre un abordaje laparoscópico. Juaneda ha sido pionera durante los últimos 15 años en la implantación de estos procedimientos».

Las intervenciones de laparoscópica urológica que se llevan a cabo con mayor frecuencia son las de extirpación del cáncer de próstata, es decir, la prostatectomía radical laparoscópica, seguida de la cistectomía radical (de vejiga) y de la nefrectomía radical (de riñón).

«En la prostatectomía radical laparoscópica se pretende no solo extirpar el tumor de próstata, sino también mantener la continencia urinaria y, en lo posible, la potencia sexual. Para ello hay que evitar lesionar el esfínter que regula la continencia y las vías neurovasculares necesarias para la erección».

De este modo explica el doctor Benejam la importancia de ofrecer un nivel de excelencia en estos procedimientos, alcanzado ya en Juaneda Hospitals tras casi 15 años de experiencia. Esta excelencia aumenta la calidad de vida, especialmente a los pacientes más jóvenes, y a los que tienen una vida sexual activa.

Los resultados hablan por sí solos. El equipo quirúrgico del doctor Benejam en Juaneda Hospitals logra en estos momentos un 100% en la preservación de la continencia urinaria y un 80% en la preservación de la potencia sexual «en aquellos casos en los que es posible hacer una conservación».

Los resultados estándares son mucho más bajos: un 20 o 30% de pacientes operados en otros centros sufren incontinencia y un 80% sufrirán impotencia tras una prostatectomía radical laparoscópica. En Juaneda Hospitals se han invertido, con creces y para bien, los resultados generales.

El equipo del doctor Benejam de Juaneda Hospitals también ha sido pionero en la extirpación de la vejiga con reconstrucción, «de modo que el paciente al que se le extirpa la vejiga (por un cáncer) puede luego seguir orinando normalmente, sin necesidad de bolsa, gracias a una nueva vejiga ortotópica».

Este procedimiento consiste en que en una serie de pacientes (no en todos) se realizará una reconstrucción de la vejiga con una porción de intestino del propio enfermo. «Ésta ha sido otra de las aportaciones que hemos hecho desde Juaneda Hospitals», destaca el doctor Benejam.

La implantación de las técnicas laparoscópicas en estos procesos ha acortado significativamente los tiempos de recuperación, al no tener el paciente que superar una gran herida abierta. Con ello, el enfermo puede ser dado de alta unos tres días después de la intervención en Juaneda Hospitals.

El doctor Juan Benejam Gual, doctor en Medicina y especialista en Urología, responsable de uno de los equipos de Urología de Juaneda Hospitals, ha sido recibido como nuevo académico numerario de la Real Academia de Medicina de las Islas Baleares.

El discurso de incorporación del doctor Benejam ha versado sobre el «Tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata: innovación y evidencia» en el que ha disertado sobre la innovación, la ética y la sostenibilidad en los procesos de validación e implantación de las nuevas terapias contra esta enfermedad.

«En mi intervención —señala el Dr Benejam— al hilo de las innovaciones sobre los nuevos procedimientos para el diagnóstico y tratamientos de la hiperplasia benigna de próstata, he reflexionado sobre la necesidad de asociar a cualquier innovación quirúrgica un estudio de evidencia científica que lo avale».

«Así como también, —añade— un estudio de sostenibilidad económica, especialmente en lo que se refiere a su instauración en la sanidad pública. Además, he realizado consideraciones éticas sobre la incorporación de esos nuevos procedimientos, que han de aportar realmente un valor añadido que los justifique».

La hiperplasia benigna de próstata (HBP) es el crecimiento benigno de la próstata, fruto del envejecimiento normal del varón: a medida que pasan los años la próstata va creciendo de un modo natural. El tratamiento y/o cirugía solo son necesarios si se dan complicaciones asociadas a un crecimiento excesivo.

«En la mayoría de casos —señala el doctor Benejam— con un tratamiento médico o simplemente con cambios en los hábitos de vida se pueden mejorar los pequeños desarreglos derivados de la HBP. Hay personas que asumen como normales los cambios en su calidad miccional, sin necesidad de tratamientos».

Sin embargo, hay varones que a consecuencia de la HBP ven alterada esa calidad miccional, por la frecuencia, por la urgencia, por sufrir dificultades para orinar… Es en esos casos hay que acudir a una valoración por el urólogo, que puede diagnosticar el problema e indicar tratamientos.

El cáncer de próstata no muestra síntomas propios, sino que presenta inicialmente los mismos que la HBP. De ahí la importancia de acudir al especialista cuando se detectan alteraciones y molestias, para descartar que se trate de un cáncer de próstata, el más frecuente entre varones entre 50 y 70 años.

El crecimiento benigno deberá ser tratado cuando presenta complicaciones: infecciones de orina de repetición, hematuria (orinar sangre) o «la complicación más temida —explica el Dr. Benejam— la retención, que es cuando el paciente siente ganas de orinar, pero no puede».

Las modernas técnicas quirúrgicas de elección en esos casos son la vaporización de la próstata con el láser verde para próstatas de pequeño tamaño, y la enucleación con láser holmium, para las mayores. Ambas por vía uretral, ambas con los beneficios de ser mucho menos agresivas que una cirugía abierta.

En ambos casos el paciente será hospitalizado, pero solo por unos dos días; y regresará a casa sin necesidad de llevar una sonda. «Los resultados son contrastados, con mejo-ría que se percibe a largo plazo. La evidencia y las guías clínicas avalan estos dos nuevos procedimientos», señala el doctor Benejam.