Cuando el Gobierno español trasponga la Directiva europea del sector, seguramente a primeros del año 2013, será obligatorio tener un certificado de eficiencia energética para cualquier activo inmobiliario en el mercado inmobiliario de venta o alquiler.

Establece que todas las viviendas, locales y oficinas deberán tener asignada, mediante dicho certificado, una etiqueta de eficiencia energética parecida a la de los aparatos electrodomésticos. La etiqueta A señalará los inmuebles que menos gastan, y la G expresará un consumo energético muy elevado.

Sabiendo el gran número de viviendas desocupadas en venta o alquiler, parece vislumbrarse una buena oportunidad profesional para los técnicos en la materia. Pero a la vez va a crear una clara segmentación del mercado inmobiliario, que se va a disociar radicalmente. Habrá viviendas cuya valoración suba a costa de otras cuyo precio va a bajar por su mala calificación. Aquí radica el peligro para muchos propietarios.

En Internet hay actualmente un boom de empresas creadas que tratan de aprovechar esta oportunidad. Hemos estudiado sus ofertas y parece haber muy pocas que ofrecen un servicio con auténtico valor añadido para el propietario. Destaca por su planteamiento riguroso una empresa que presta su servicio por Internet, denominada CertiFACIL.es

Resulta atípico que el servicio sea gratuito y no tenga tarifas ni precios estimados. Se ofrecen comercialmente como un comparador independiente de presupuestos que, mediante la competencia real entre los tres mil técnicos afiliados que tiene en toda España, consigue el mejor precio para el cliente. Probablemente sea así, pero lo que distingue a este colectivo es lo restrictivo de los criterios que emplea en la admisión de técnicos.

Javier Cardós, joven arquitecto portavoz de este colectivo, nos dice que la plataforma no acepta a ningún técnico que no pase su estricto proceso de evaluación, que han contratado a la Asociación Nacional de Certificadores Energéticos. Esta asociación analiza los documentos del aspirante y lo admite si prueba un excelente conocimiento en esta materia. Para facilitar la formación de su colectivo CertiFACIL ha creado, con la supervisión técnica, tutorías y evaluación final a cargo de la mencionada Asociación Nacional, un curso de certificación energética y un servicio de asistencia técnica para los certificadores.

La formación del certificador es vital para la defensa de los intereses del cliente, puesto que la precisión de los cálculos consigue mejores etiquetas que si se utilizan para el cálculo valores estimados. Y una buena etiqueta energética significa más valor en el mercado para la vivienda.

Al final, le resulta carísimo al dueño del inmueble contratar un técnico escasamente cualificado. Dos letras de diferencia en la etiqueta energética significan un gasto energético un 32% mayor. Dicho crudamente, el problema no es gastarse 320€ en los honorarios del técnico, sino perder 30.000€ en el valor de su inmueble que un técnico mejor preparado le hubiera defendido con su trabajo.

Varios estudios estadísticos han demostrado que utilizando un comparador de presupuestos con auténtica competencia el cliente obtiene un precio un 25% inferior que si contrata el trabajo tras pedir presupuestos sueltos a varios proveedores.

Preparemos pues el bolsillo, pero debemos asegurarnos que el gasto de la certificación energética no nos cause ningún daño patrimonial y, si optamos por contratar en Internet, deberemos elegir el servicio que tenga un planteamiento más honesto y el mayor respeto por los intereses del cliente.

Un balón de oxígeno para la gran multitud de profesionales de la arquitectura o la ingeniería industrial que no consiguen acceder al mercado laboral. La mayoría de ellos son jóvenes, que por su excelente grado de formación serían un lujo para cualquier país desarrollado y que en este momento no encuentran el camino para iniciar sus carreras.

Al hilo de esta oportunidad ha iniciado recientemente sus actividades la plataforma Certifacil.es que integra a un colectivo de 2.800 profesionales españoles que cubre la totalidad de la nación.

La oferta de Certifacil.es está orientada al servicio e interés del consumidor. Se le ofrece un servicio gratuito que consiste en primer lugar en comprobar si le afecta esta nueva normativa, que tiene varios casos de exclusión. Y en caso de fuese obligatorio realizar la certificación energética de la vivienda ofrece al consumidor otro servicio gratuito; consiste en hacerle llegar varios presupuestos de técnicos certificadores cercanos.

De cada uno de estos técnicos se ofrece al usuario, además de un precio fijo y un plazo de entrega, la valoración de otros usuarios anteriores que han utilizado sus servicios. De esta manera el consumidor puede contratar la mejor relación calidad-precio.

El efecto combinado del gran alcance geográfico y de la calidad profesional de esta red le convierte en una opción de referencia para gran número de entidades inmobiliarias y financieras, que pueden certificar rápida y económicamente un gran contingente de inmuebles situados en cualquier punto de España.

Un ejemplo de ingenioso asociacionismo y una apuesta por el futuro de un mercado emergente.