"He sido diputada del PP, pero me salí porque son unos señoritingos". Habla Ana María Aguiló, la candidata a la alcaldía de Palma bajo las siglas Sumam. Exreina del Twitter y la polémica encendida en el pasado mandato, hoy patea las calles con folletos y papeletas defendiendo formación propia después de buscar espacio -a veces a través de persona interpuesta- sin resultado satisfactorio en Ciudadanos o en el partido de Jorge Campos. Sin remilgos, dice que Sumam son unas siglas del pueblo, "no somos ni de derechas ni de izquierdas". Aunque en el programa puedan leerse frases que poco tienen que ver con la retórica centrista: "El que la hace, la paga" o "Quitaremos todas las subvenciones al catalán dado que no es nuestro idioma". "Tampoco queremos que Palma sea una ciudad de acogida hasta que no ordenemos la inmigración que hay aquí", explica, mientras arrastra un altavoz que escupe cuñas publicitarias. "Como ves, yo no tengo despacho. Mi oficina es una furgoneta", concede. "Fageda decía que si en cada campaña electoral no gastabas tres pares de zapatos es que no lo estabas haciendo correctamente".

Se acerca a tres vecinas de Corea que comen pipas en la calle. Les explica que si ella gobierna "estos pisos no se van a ir a especuladores. No les vamos a dar 20.000 euros para que ustedes se vayan, se los vamos a arreglar", promete. María Dolores Fernández le pregunta por los okupas. Ana María tiene respuesta para todo: "Hay dos tipos: los que delinquen y los que lo hacen por necesidad. A los que delinquen los perseguiremos. Vamos a aumentar en un 30% los efectivos de la policía. Para los otros, la solución pasa por arreglar las 2.000 viviendas que son del Ayuntamiento y los bancos y ofrecerlas con un alquiler social del 25% del sueldo", propone. No es la primera vez que Aguiló viene a hacer buzoneo presencial en este barrio, donde tiene una reunión con otros candidatos a petición de la Plataforma Salvem Camp Redó y la asociación de vecinos en colaboración con la Federació de Veïnats de Palma.

Un grupo de jóvenes le relata sus problemas: el más mayor ha okupado un piso después de estar preso y encontrarse que su casa había sido derribada, otro le pide que arregle el tema del trabajo y alguien más rezagado le contesta que no puede leer el folleto porque no sabe leer ni escribir. Aguiló responde las preguntas y les recomienda que, si quieren soluciones, metan la papeleta que les entrega en la urna. Le acompañan Guiem Matas, en listas, coronel retirado y vicepresidente de la Acadèmi de sa Llengo Baléà; Joaquín Alcolea, guardia civil jubilado, y Xisco Amengual, su número 2. Aguiló confiesa que esperan obtener dos o tres regidores. "La encuesta interna de Ciudadanos nos da uno".

Actúa por Palma

A escasos metros, la candidata de Actúa por Palma, Shirley Siles, entrega a un grupo de personas mayores de Camp Redó el programa del partido, impulsado por Baltasar Garzón y Gaspar Llamazares. "Somos las siglas de los olvidados, los sin voz, por eso he entrado en política", relata la activista y exlíder de las camareras de pisos y hoteles. De corte progresista, las medidas que proponen pasan por pedir una Palma transparente y participativa, sostenible, limpia, multicultural y accesible. "Si entramos en el Ayuntamiento, va a ser la casa del pueblo", subraya. "Vamos a escuchar a todo el mundo". De momento, la campaña que están desarrollando es también a puerta fría y en redes sociales. "Casa por casa, barrio por barrio". "Hasta los folletos los hemos pagado de nuestros bolsillos". Esperan mejorar los 800 votos que sacaron en Ciutat en las generales.

Crida per Palma es la opción que más acciones creativas y performativas está desarrollando en la calle estos días de campaña. Ayer simularon frente al Parc de Ses Veles el precinto de un salón de juegos.

Este diario ya ha dado cuenta de otras iniciativas. Conforman las listas vecinos y vecinas que provienen de diferentes movimientos sociales: feministas, Ciutat per qui l'habita... Juegan la baza de que no son profesionales de la política. Pese a ello, han tejido alianzas con la CUP de Barcelona, tal y como explica la número 2 de la formación Laura Dorado (Manel Domènech encabeza la lista). De hecho, "hay alguna persona que ha participado en candidaturas de otros lugares, por ejemplo con la CUP de Lleida". Una experiencia que sin duda se nota, por ejemplo, en la comunicación profesional que establece la formación con los medios. Crida son conocidos por ser "los críticos de los críticos". "El pacto en el Ayuntamiento no sólo no ha propuesto una alternativa al modelo de ciudad diseñado por el PP y las élites económicas, sino que lo ha perpetuado", lamentan.

Quienes también van a plantar cara en las islas son Pacma, el partido animalista. El escritor y periodista Juan I. Codina es el candidato al Parlament. Marina Mir lucha por Cort.