Cuando Apple anunció su plataforma de pago móvil, Apple Pay, el 9 de septiembre de 2014, en el marco de su tradicional keynote otoñal -en la que suelen presentar los nuevos iPhone-, la omnipresente tecnológica sabía muy bien que iban a poner patas arriba otro sector económico. Esta vez le tocaba a la banca.

Tras revolucionar la música, los ordenadores y la telefonía había llegado el momento de pegarle un meneo al sector de los pagos tanto en tiendas físicas como en línea. Y como en todas las ocasiones anteriores, para ello usó lo que mejor sabe hacer: tecnología.

"La interfaz de las tarjetas de banda magnética está desfasada y es vulnerable" afirmó Tim Cook, consejero delegado de Apple durante la presentación de su plataforma de pago. Había llegado la hora de la seguridad biométrica en el pago a través del sensor de huellas dactilares del iPhone 6.

El 20 de octubre de ese mismo año, se lanzaba en EE.UU. Apple Pay, el primer servicio de pagos móviles compatible con diferentes tarjetas y entidades bancarias. El sistema, que se podía usar con el recién estrenado iPhone 6, le añadía algo de picante al mercado al ser compatible también con algunos modelos de iPad y con el novedoso Apple Watch. La reacción en la primera economía del planeta no se hizo esperar y ya en su lanzamiento, la plataforma contó con más de 500 entidades financieras -entre bancos y empresas de tarjetas- que vieron en la nueva plataforma de pago móvil de Apple una revolución solo comparable a la aparición de las tarjetas bancarias. A día de hoy son 1.363 las entidades financieras que usan Apple Pay solo en EE.UU.

Pese a los iniciales problemas de compatibilidad entre terminales TPV y el iPhone -lógicos si se tiene en cuenta que se trataba de una tecnología inexistente hasta ese momento-, el éxito fue abrumador. Y su expansión internacional, minuciosamente calculada.

En julio de 2015, tras varios meses puliendo el sistema, Apple Pay se lanzó en Gran Bretaña, el segundo país al que llegaba la plataforma y el primero en Europa. Los ocho bancos que se subieron al carro de los pagos móviles en aquel primer momento en Gran Bretaña son a día de hoy 33.

En febrero de 2016 llegó el lanzamiento en China, en un año en el que la plataforma no paró de crecer. Ese mismo año Apple Pay llegó a España a través de un único banco, además de American Express. Hoy son 19 entidades financieras en nuestro país.

En 2020 se estima que habrá 450 millones de usuarios de plataformas de pago móvil OEM -del estilo de Apple Pay, Samsung Pay o Google Pay- en todo el mundo, según la consultora Juniper Research. La misma consultora afirma en ese mismo informe que la mitad de ellos serán usuarios de Apple Pay.

El mismo estudio augura transacciones con estos tipos de pago móvil por valor de 257.000 millones de euros en todo el mundo. Esto supondría que el 15% de todos los pagos en comercios minoristas se harán con el móvil. Y pese al éxito, la creadora del iPhone y el iPad no se detiene. Su siguiente apuesta se llama Apple Pay Cash, con la que se podrá enviar dinero vía móvil a cualquiera.