En contra de lo que pueda parecer, Alemania no es un país puntero en Europa en lo referente a los pagos móviles. La tradicional costumbre germánica de usar dinero en metálico para pagar las operaciones diarias y de pequeño importe está haciendo que el pago móvil sea tan solo una mera anécdota. Al menos por el momento.

En Alemania el metálico es el rey. No cabe ninguna duda. Según el Banco Central Europeo, el país bávaro es uno de los que menos utilizan el pago con tarjeta de toda Europa. En 2014, los alemanes realizaron menos de 50 transacciones anuales mediante dinero de plástico, una cifra que contrasta con las más de 250 de suecos y daneses, o las 200 de los británicos.

Y es que casi la mitad de todos los pagos que se realizan en Alemania se hacen en metálico, según GFK. La consultora publicó un estudio el pasado año en el que se afirmaba que el 49% de los pagos realizados en Alemania fueron en metálico. El segundo método de pago más utilizado es la tarjeta de débito -un 29%- seguido de la tarjeta de crédito -un 17%- . ¿Y el pago móvil? Pues fue utilizado en un triste 2% de todas las transacciones realizadas.

Esta situación ha provocado, entre otras cosas, que los gigantes tecnológicos no hayan visto hasta ahora el mercado alemán como un elemento clave en la expansión de sus plataformas de pago. En junio aterrizó en el país centroeuropeo Google Pay, la primera gran plataforma en hacerlo.

Poco después, durante la tradicional llamada de Apple con los medios para informar de los resultados económicos de su tercer trimestre fiscal -el pasado mes de julio- el gigante norteamericano anunció que Apple Pay estará disponible en Alemania a finales de año, aunque sin confirmación de una fecha concreta.

Tanto Google como Apple tendrán que competir con una nueva plataforma de pagos móviles puesta en marcha por el Bundesverband der Deutschen Volksbanken und Raiffeisenbanken, la mayor asociación de bancos del país, que aglutina a 915 entidades.

En un comunicado hecho público a principios de agosto, la asociación de bancos alemanes anunció que el 85% de sus 915 miembros iba a ofrecer un sistema propio de pago móvil bautizado con el nombre de VR Banking. La aplicación, que está disponible únicamente para dispositivos Android desde el día 13 de agosto, permite pagar en más de medio millón de comercios en toda Alemania, y atendiendo a las puntuaciones que está obteniendo en Google Play, todavía tiene mucho que mejorar.