El precio de los carburantes sigue marcando máximos anuales semana tras semana, manteniéndose en niveles no vistos desde 2014 en el caso de la gasolina y desde 2018 en el del gasóleo, y provocando que en pleno mes de agosto, con la movilidad disparada por las vacaciones estivales, llenar el depósito sea hasta 15 euros más caro que hace un año.

Según los últimos datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE), la gasolina se paga actualmente en España a una media de 1,419 euros el litro, mientras que el gasóleo lo hace a 1,270 euros, lo que supone un aumento del 23% y del 20% respectivamente en comparación con el mismo periodo de 2020, y del 7% y del 4% respecto a 2019, antes de la pandemia.

Con estos precios, rellenar un depósito de 55 litros con gasolina cuesta alrededor de 78 euros, frente a los 70 euros que supone hacerlo con gasóleo, superando así en casi 15 euros el precio de hace un año de la gasolina y en 12 euros el del gasóleo.

Respecto a la semana del 21 de junio, cuando comenzó oficialmente el verano, ambos productos son alrededor de un 3% más caros, mientras que si se compara con el inicio del verano de 2020, cuando la movilidad empezaba a recuperarse progresivamente tras el confinamiento decretado durante el primer estado de alarma, la gasolina y el gasóleo se han disparado un 26% y un 24% respectivamente.

El precio de los carburantes mantiene una tendencia alcista desde noviembre. En lo que va de 2021 la gasolina es un 20% mayor y el gasóleo un 19%, y solo ha habido dos semanas en las que el precio ha caído respecto a los siete días previos.

Así, en un periodo vacacional que tradicionalmente registra un marcado aumento de la movilidad, el precio registrado esta semana por la gasolina es el más alto para un mes de agosto desde 2013, mientras que el gasóleo marca su valor más alto para este mes desde 2015. Pese a la escalada de precios, ambos carburantes siguen aún lejos de los máximos históricos que alcanzaron la semana del 3 de septiembre de 2012, hace casi nueve años, cuando la gasolina costaba 1,522 euros y el gasóleo, 1,455 euros.

Grandes diferencias por territorios

No obstante, esta fotografía cambia según el territorio en el que se pare a repostar, y es que los precios que aparecen en el Boletín Petrolero son una media nacional para los dos carburantes más frecuentes en España, la gasolina 95 y el gasóleo. De hecho, Canarias y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla tienen una fiscalidad diferente, lo que se traduce en unos precios más bajos.

Tal es el caso de Agüimes y Gáldar, en Las Palmas de Gran Canaria, o Adeje, Los Realejos y la propia Santa Cruz de Tenerife, donde la gasolina más cara no llega ni al euro por litro, según los datos del Geoportal de gasolineras del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

En la península, la más barata se encuentra en el municipio valenciano de Cortes de Pallás, a 1,149 euros el litro, conforme a la misma fuente. A un precio sensiblemente superior, aunque por debajo de la media, está en Algeciras (Cádiz), donde el litro se paga a 1,187 euros, seguido de los municipios jienenses de Torreblascopedro y Sabiote, a 1,2 euros y 1,225 euros, respectivamente.

Por el contrario, la gasolina más cara de toda España se encuentra en la localidad granadina de Baúl, a 1,695 euros el litro; Bembibre (León), a 1,599 euros; y Badajoz y Calonge (Gerona), a 1,569 euros en ambos casos.

Respecto al gasóleo, en la península el más asequible está en Navalvillar de Pela (Badajoz), a 1,039 euros; acto seguido aparece Andújar, a 1,043 euros, y de nuevo Cortes de Pallás, en Valencia, a 1,047 euros. Baúl, en Granada, vuelve a tener el combustible más caro, con el gasóleo a 1,529 euros el litro, seguido de Burriana, en Castellón, a 1,444 euros; Montseny, en Barcelona, y Cabanes, en Castellón, a 1,439 euros; así como Es Mercadal y Santa Eulalia del Río, en Baleares, a 1,419 y 1,409 euros, respectivamente.