Los programas de rebaja fiscal del Gobierno de la canciller Angela Merkel han enfrentado a la líder cristianodemócrata (CDU) y a los jefes de Gobierno regional de su partido.

La negativa del Ejecutivo central a compensar a los ´Länder´ alemanes por ese descenso de la recaudación pública, ha llevado al primer ministro de Schleswig-Holstein, Peter Harry Carstensen, a amenazar con dimitir de su puesto, según recogía ayer el semanario ´Der Spiegel´.

Los líderes regionales de la CDU han criticado repetidamente la nueva ´Ley para acelerar el crecimiento´, que actualmente se encuentra en debate parlamentario, y que contempla reducir la carga tributaria a partir de 2010 en 8.400 millones de euros para familias y empresas con el fin de estimular la demanda y combatir la crisis.

"Si la ley se formula así, me quedo sin espacio para actuar. Entonces debería encargarse otro", afirmó Carstensen, según el semanario.

Si el Gobierno de Schleswig-Holstein se opone al proyecto de ley, el texto carecería de mayoría parlamentaria para ser aprobado por el Bundesrat (cámara de representación regional del Parlamento) el próximo 18 de diciembre.