El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, advirtió ayer de que la situación de los mercados financieros internacionales "dista mucho de haberse normalizado plenamente" y auguró que la actual fase de bajo crecimiento "podría prolongarse más de lo esperado".

No obstante, apuntó que en los últimos cuatro meses "han ido remitiendo los riesgos de que se produzca una crisis financiera con una recesión global" y consideró que la desaceleración mundial está siendo menor de lo anticipado en marzo.

En su intervención en un almuerzo-coloquio organizado por la Cámara de Comercio Estadounidense en España, también consideró que en el futuro no volverán a darse tasas de inflación tan "benignas" como las de los últimos años, y defendió una política monetaria que actúe "con firmeza" para ayudar a estabilizar los precios.

En este sentido, advirtió de que la persistencia de tasas de inflación elevadas durante un periodo prolongado puede producir efectos de segunda ronda y "poner en duda la capacidad de los bancos centrales para alcanzar sus objetivos".

Fernández Ordóñez advirtió de que "es difícil pensar" que vuelvan a darse unas condiciones financieras "tan holgadas" como las del último lustro.

No obstante consideró que aunque el endurecimiento del crédito tenga un efecto "moderador" sobre la economía en la actualidad, ayudará a fortalecer el sistema financiero y a hacer más "sostenible" el próximo ciclo económico expansivo.

Por otra parte, el Servicio de Estudios Económicos del BBVA destaca que la economía española tendrá "crecimiento cero" en el segundo trimestre del año -frente al 0,3 por ciento que registró entre enero y marzo-, mientras que la tasa interanual se situará "holgadamente" por debajo del 2 por ciento. Los expertos del BBVA basan esta previsión en los últimos datos conocidos sobre actividad industrial, consumo y empleo.

Asimismo, señala que el Índice de Producción Industrial (IPI) podría caer un 6 por ciento en junio, frente al 5,5 por ciento que descendió en mayo, afectado por la huelga de transportistas.

Este índice sólo caería un 2,3 por ciento en junio si no se toma en consideración los efectos de esa huelga.