Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cartulina morada | Más golpeador que goleador

La vida de Diego Armando Maradona siempre estuvo llena de luces y sombras, unas sombras que, tras el fallecimiento del astro argentino, muchos se han encargado de ocultar. Excesos, adicciones, mujeres, casos pendientes de sexo con menores, maltratos… La lista no es corta y el espacio de este artículo no excesivamente largo. ¿Hasta qué punto define la vida del futbolista haber ejercido la violencia? ¿Puede considerarse solo un detalle anecdótico? Ya les contesto yo. No. La casualidad hizo que el Pelusa falleciese en 25 de noviembre, Día Internacional Contra la Violencia de Género. 

Muchos pasos atrás Mitificar a una persona tras su fallecimiento y olvidar su vida y obra

En la biografía del astro argentino los episodios violentos estaban muy frescos en la memoria colectiva, casi tanto como sus borracheras públicas, y dejaban ya en un segundo o tercer plano sus jugadas más famosas sobre el verde. Maradona ha muerto en una época en la que las feministas se levantan día sí y día también para luchar precisamente contra perfiles como el suyo. Mitificar ahora su persona, simplemente por el hecho de haber muerto, es dar muchos pasos atrás en esta lucha. 

Alguna de sus perlas «Es vergonzoso que los futbolistas dejen hablar a sus mujeres de fútbol»

«Es vergonzoso que tu mujer empiece a hablar de fútbol, de tácticas, de que tenía que jugar este o el otro… No güey, no hermano. Es vergonzoso que los futbolistas dejen hablar a sus mujeres de fútbol». Esa es alguna de las perlas que lanzó, no hace tanto, Maradona sobre el papel que debe tener la mujer en la vida. Por suerte, Dieguito, no todo el mundo opina como usted y hoy en día nos dejan hablar y escribir de fútbol tanto como nos apetece. Se ha ido un gran futbolista, pero ese jugador murió hace ya muchísimos años, quien se marchó ahora era un violento. 

La recepción de un campeón En tiempos de coronavirus y todo lo que ello conlleva

En estos tiempos que corren no es fácil organizar un evento y mucho menos orquestarlo de manera sobresaliente. Pues esta última semana, todo un campeón del mundo como Joan Mir aterrizó en su isla para celebrar el título de MotoGP con los suyos y todo fue como la seda. La prensa balear tuvo su momento con el piloto de Suzuki, también los políticos de turno, pero sobre todo los que pudieron disfrutar de su ídolo fueron los aficionados, con una caravana capitaneada por el propio Mir, que se movilizó desde el Circuit de Llucmajor hasta la sede del Govern en el Consolat. Pedro Mas, expresidente de la Balear, fue el encargado de organizar el evento. Un diez para Mir y un diez también para él.  

Los trofeos de las instituciones Mir podrá llenar las estanterías con los obsequios que recibió

En la recepción que los políticos hicieron al piloto en el patio del Consolat no hubo una institución que se quedara sin entregar su obsequio al piloto mallorquín, a cada cual más estrambótico y variopinto. Igual que el del Consell de Mallorca, tengo yo tres en las estanterías de mi casa, en mi frustrada vida como atleta en las carreras populares de la isla. Con unas palabras habría bastado y habrían quedado mejor.

Compartir el artículo

stats