El presidente de la Liga de Fútbol Profesional ha vuelto a desbarrar. Y de qué manera. Tebas peca de incontinencia verbal. Pertenece a esta clase de personajes del fútbol a los que les pones un micrófono en la boca y la lían. Se creen los amos del mundo. En ocasiones, aplicar la diplomacia es un signo de inteligencia, virtud de la que carece el presidente de la LFP. Puedes estar en desacuerdo con el nuevo formato de la Copa, pero sin meterse con nadie. Además, y lo que es peor, es que miente. En 2003, año en que el Mallorca levantó la Copa del Rey, el torneo se disputaba a doble partido desde octavos de final, a diferencia de lo que ocurrirá a partir de la próxima temporada, en la que será a duelo único hasta semifinales. Tebas ha perdido una gran ocasión de mantener la boca cerrada. Habla y no sabe de qué, y para mostrar su desacuerdo con Rubiales confunde a través del engaño. Todo muy lamentable.
