El Iberojet Palma se reconcilia con la victoria

El orgullo salvó al Iberojet Palma de recibir una nueva estocada en la recta final de la LEB Oro venciendo a un duro Chocolates Trapa Palencia por 82-70. Una reconciliación con el triunfo que le permite escalar dos puestos en la clasificación e instalarse octavo tras la derrota del Valladolid.

De nuevo, la actuación coral de los mallorquines fue una de las claves en la que destacó una vez más Guerra acompañado de un escuadrón de "valientes" compuesto por Carles Bivià, Gilbert, Hernández y Barac.

La entrada en partido del Iberojet Palma denotó dudas en su juego ante un Palencia que llegaba muy confiado en el tiro y no se privó en lanzar cuando tenía un mínima ventaja. El jugador rival Hermanson protagonizó varias acciones brillantes que permitió al conjunto palentino colocarse con hasta diez puntos arriba.

No obstante, un altercado de Gustys, señalado con técnica por provocar a la afición mallorquina, despertó a los mallorquines, que sacaron su garra para devolver la igualdad en el electrónico (25-27). En parte, la esperanza del conjunto verdinegro reapareció gracias a la dureza defensiva del Palencia, que permitió a los locales convertir diez tiros libres.

Con su lucha constante, los juadores de Félix Alonso lograron adelantarse en el marcador gracias al liderazgo de Hernández. La buena circulación del balón permitió dar un golpe final, firmando un parcial de 8-0, que permitió marcharse al descanso con una ventaja de nueve puntos (49-40).

El Palencia demostró que su fortaleza es no temer a la barrera de los diez puntos de diferencia. Los hombres de Carles Marco no se cohibieron en ningún momento en seguir su filosofía de jugar y lanzar rápido sin dudar.

Sin embargo, Marcus Gilbert, que ha recuperado su mejor versión desde su lesión, aniquiló la defensa zonal de los palentinos anotando cuatro triples sin fallo que llenó de confianza al equipo.

Una vez más, la cómoda ventaja devolvía la magia a Son Moix con acciones brillantes que luego se desvanecieron por un juego conservador que ansiaba finalizar el partido para sellar otra victoria de prestigio. Ahora, el Iberojet debe rematar la faena en su cita con el Ourense. Otra prueba de fuego para entrar en el play-off.