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Minuto 91

La semana de Moreno y Lago

El entrenador y la figura del Mallorca han sido los grandes protagonistas de los últimos días, el primero por las dudas en torno a su continuidad, y el segundo por su golazo al Deportivo

Andy Köhlberg, ayer en el Palau, junto a su mujer, el subdirector general de Air Europa Richard Clark y Boscana. Iberojet Palma

No ha sido una semana más en el Mallorca. Después de perder de mala manera en Almería, pocos se podían imaginar que los siguientes días serían tan movidos. Primero, con las declaraciones a este diario de Vicente Moreno, que ha puesto de los nervios a los aficionados al no asegurar su continuidad la próxima temporada pese a tener un año más de contrato. Y segundo, con el golazo de Lago Junior al Deportivo, el noveno de la temporada, que proporcionó una victoria importantísima a su equipo para seguir en la pelea por la sexta plaza.

Ya se sabe que en el fútbol lo que hoy es blanco, en horas puede ser negro. Y que ni siquiera un contrato firmado, como es el caso, garantiza nada. Pero el Mallorca debería buscar la fórmula para asegurarse la continuidad de Moreno, la pieza clave y en quien hay que explicar la excelente trayectoria del equipo. Un conjunto liderado en el campo por Lago. "Un delantero de toda la cancha que juega y hace jugar, genera ocasiones, marca goles y, además, cumple con las obligaciones con la obediencia de un solado". Estas líneas las escribió Valdano el pasado sábado sobre Griezmann, que es al Atlético lo que Lago al Mallorca. Las certeras palabras del exfutbolista y escritor argentino bien podrían haberse referido al de Costa de Marfil.

Andy Köhlberg bajó ayer en el Palau de Son Moix las expectativas en el mercado invernal y aseguró que solo se reforzará el equipo si es con un gran fichaje. Es la palabra del presidente, que no concuerda con las pocas pistas que ha ofrecido el club en las últimas semanas. La intención es fichar, si puede ser un hombre gol. En este caso hay que fiarse más de Recio y Moreno que no de un Köhlberg muy alejado de la realidad del club.

El Atlético Baleares rompe su racha. Después de ocho victorias consecutivas en Son Malferit, el conjunto blanquiazul rompió la racha con un inesperado empate ante un Castellón en horas bajas. Un pequeño accidente que no debe suponer ningún contratiempo en el objetivo del equipo, el de meterse entre los cuatro mejores. En ello están mientras deciden si fichan a Miño para ser el dueño de la portería. Se saldrá de dudas esta misma semana, pero todo apunta a que finalmente el exrojillo se vestirá de blanquiazul.

El Iberojet sigue dando la de arena. La derrota de ayer ante el peor visitante de la categoría no entraba en los pronósticos ni del más pesimista de los aficionados. El equipo de Félix Alonso tiene un problema y no sabe cómo solucionarlo. Y eso que ya se ha alcanzado el ecuador del campeonato. Con una plantilla creada para luchar por el ascenso a la ACB -al menos eso se vendió-, la decepción no puede ser mayor.

El Cide, una derrota que engrandece. Las chicas del JS Hotels Cide lideradas por la incombustible Cati Pol tocaron con las manos su segunda Copa Princesa, pero se derrumbaron en la muerte súbita del quinto set. Tras eliminar al Extremadura, ayer se rindieron ante Socuéllamos manchego en una final a la que no le faltó de nada. El Cide se despide del torneo con la cara muy alta. Salió cruz, como pudo haber salido cara.

Nadal y Munar afrontan en Melbourne el primer grande del año. El manacorí ha debutado esta madrugada y el de Santanyí lo hará en la próxima ante el italiano Fognini. Tras cuatro meses ausente de las pistas, es toda una incógnita el rendimiento que pueda ofrecer el ganador de diecisiete grandes. Pero si de alguien se puede esperar lo mejor es de Nadal.

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