Tras cuatro jornadas impecables, el Palma Futsal sucumbió frente a Osasuna Magna en un partido en el que no mostró el nivel defensivo y diferencial que ofreció en el comienzo del curso y en el que la falta de puntería les sentenció. Estrelló cuatro balones en el palo de la portería de Asier, que tuvo una actuación brillante. La derrota por 4-0 se fraguó en apenas cinco minutos del segundo tiempo en el que los mallorquines encajaron tres goles. Excesivos errores en defensa que costaron los primeros puntos de la temporada y encajar tantos goles como en las cuatro jornadas anteriores.

La Primera División exige máximo nivel competitivo y de concentración para ganar. Y si enfrente tienes al Osasuna Magna, con más razón todavía, un equipo que en casa siempre ofrece una imagen fiable y es difícil de batir. El Palma arrancó el encuentro con una presión alta que ahogó al rival y generando ocasiones de peligro. Asier intervino en tres ocasiones en apenas dos minutos y el guión parecía el habitual de los últimos partidos pero fue únicamente en el primer párrafo del relato porque luego la balanza se decantó a favor de los locales, que contrarrestaron el comienzo balear en el momento que se hicieron con el balón. Quintela, en dos ocasiones, y Joselito abrieron los fuegos de artificio pero Asier no fue un mero espectador y estuvo sólido bajo palos. Tomaz se lesionó y no pudo jugar el resto de partido.

Osasuna encontró petróleo en su primera exploración. Dani Saldise aprovechó un error en defensa para marcar el primero. La respuesta del Palma fue un lanzamiento al palo de Hamza, el primero de los tres que tuvo el Palma en todo el partido. El siguiente fue de Joao a los pocos minutos. Bruno Taffy tuvo el empate al borde del descanso con un doble penalti que estrelló en el palo.

El Palma Futsal se fue al vestuario con opciones de ganar el partido pese a ir con un gol en contra y las perdió todas cuando regresó a la pista. Araça marcó el segundo a los trece segundos de la reanudación en un lanzamiento lejano que sorprendió a Barrón, a quien se le escapó el balón. El equipo acusó el gol y lo pagó con dos más. Roberto Martil marcó el tercero y Rafa Usín hizo el cuarto. El Palma encajaba los mismos goles en apenas veintiséis minutos que en las cuatro jornadas anteriores. Con el marcador claramente en contra, el Palma Futsal se volcó en ataque para tratar de maquillar el marcador, pero no era su día.