La Penya Arrabal se quedó con un inmerecido empate (1-1) en su histórico debut en la División de Honor juvenil. Los futbolistas de Miguel Soler se hicieron acreedores a la victoria ante un El Olivar que se encontró en Can Valero con el gol en propia puerta de Pablo, que no se entendió con su portero Campaner en una cesión; un tanto que le dio para llevarse un punto. Fue el único error grave de una Penya Arrabal que, a excepción de los primeros minutos, controló el juego y llevó el ritmo del partido, disfrutando de ocasiones para ampliar la ventaja antes del mazazo visitante.