Su undécimo triunfo en Roland Garros permite a Nadal conservar el número uno del mundo, que recuperó el pasado 20 de mayo al conquistar el Masters 1.000 de Roma al derrotar en la final al alemán Alexander Zverev. El tenista de Manacor acumula 176 semanas liderando el ránking de la ATP en diferentes etapas, desde que se encaramó por primera vez en 2008, y hace seis semanas superó en la clasificación de semanas como número uno al norteamericano John McEnroe. Debido a la mínima diferencia que le separa de Federer, apenas cien puntos, el liderato, algo que hace tiempo ha dejado de preocupar a Nadal, corre serio peligro de perderlo. El suizo, que por segundo año consecutivo ha prescindido de la temporada de tierra, disputa esta semana el ATP 250 de Stuttgart, como preparación al torneo de Wimbledon, participación que, salvo que caiga en las primeras rondas, debería proporcionarle de nuevo el número uno del ránking ATP. Una posición que para conservarla le obligará casi con toda seguridad a ganar el grande londinense siempre que Nadal supere los octavos de final. Si se diera esta circunstancia se produciría el enésimo cambio en el liderato del ránking.
