El Ajuntament de Palma ya ha iniciado los trámites con el objetivo de poder acometer en 2019 la remodelación de las cerca de 20 instalaciones municipales en las que los clubes de la ciudad entrenan y juegan sus partidos. La intención de los responsables del Institut Municipal de l'Esport (IME) es adjudicar las obras a principios de año, una remodelación que han pevisto que tendrá un coste superior a los 4 millones de euros y que abarca el cambio de césped artificial, la instalación de focos tipo LED y la reparación y mantenimiento de la instalación.

La gran novedad del proyecto es que si no hay dinero a través de los presupuestos o de la Ley de Capitalidad para acometer la reodelación, esta reforma se realizará a través de un renting a diez años. De hecho, los técnicos del IME (Institut Municipal de l'Esport) ya trabajan desde hace tiempo en el pliego de condiciones de lo que es un plan B de Cort, que no quiere perder otro año en iniciar unas obras que prometió a los clubes de Palma que empezarían en 2017.

No sería novedosa la contratación, pese a que sí es muy llamativa la decisión de utilizar el sistema de renting -principalmente porque se pagan intereses- para la reforma de los campos de fútbol. El renting es un contrato de alquiler de bienes físicos, superior a un año -se calcula la vida útil del bien o inmueble- y en el que no hay compra -en el leasing sí hay compromiso de compra-; es habitual que el propietario del bien o inmueble sea el responsable de su mantenimiento.

Según los actuales responsables del deporte en Cort (PSOE), ya se hizo de esta manera en 2006, cuando gobernaba el PP. Al parecer, se realizó esta contratación para instalar el césped sintético en distintos campos de fútbol, pero ni en el IME ni las propias empresas que los instalaron tienen constancia de que durante estos años se hayan realizado trabajos de reparación o de mantenimiento.

En el IME trabajan desde hace más de dos años en la actualización de los campos de fútbol de Palma. Son casi una veintena y prácticamente todos tienen un césped artificial defectuoso, principalmente por el uso y porque algunos tienen más de diez años.

Los técnicos municipales continúan revisando instalaciones y se salvan muy pocos de una intervención; entre ellos La Antoniana -donde juega el Independiente y que inauguró la hierba sintética en junio pasado- y el Germans Escalas (se construirá un nuevo campo de fútbol y otro de rugby).

Inicialmente, las previsiones apuntaban a un gasto de algo más de dos millones para el nuevo césped en 17 campos (quizás se añada alguno o se decida no cambiarlo y solo arreglarlo en otros).

Un dinero que el IME no tenía, aunque el alcalde Antoni Noguera se comprometió hace unos meses a encontrar financiación.

Sin embargo, en el IME han decidido ir más allá y aprovecharse de la necesidad de renovar el césped artificial para acometer también una renovación en la iluminación, apostando por los focos LED (permiten un ahorro energético de más del 70%). Además, en muchos campos hay que acometer diversas reformas en gradas, vestuarios o infraestructuras.

Estos añadidos a la remodelación del césped sintético ha elevado el presupuesto a algo más de cuatro millones de euros.

Costaría medio millón por año

Con todo esto, en Cort se ha querido ser previsor por si es insuficiente la cantidad de que se dispone, por lo que se decidió estudiar hace unos meses la posibilidad de adjudicar las obras a través de un renting.

De esta forma, una empresa se encargaría de las obras para instalar el nuevo césped artificial y los focos LED, así como de su mantenimiento y reparación durante diez años.

En el IME calculan que el coste será de medio millón de euros por año. En total, unos cinco millones (en un renting hay que pagar intereses). Si el plan avanza como está previsto, a principios de 2019 se adjudicará el proyecto -hay dos empresas interesadas- y se comenzarán las obras. Ya sea con el dinero en la mano o través del plan B, el renting.